Continuas pruebas de lanzamientos de satélites estallan cuando, ya en el espacio, topan con una barrera energética. La Tierra recibe un mensaje del cosmos indicando que toda prueba seguirá siendo saboteada, puesto que nuestro planeta es aún inmaduro y no merece tomar parte en la conquista del espacio.

Dirección: Roger Corman. Producción: Allied Artists Pictures, Santa Cruz Productions Inc. Productor: Roger Corman. Co-productores: Irving Block, Jack Rabin. Guion: Lawrence L. Goldman, según argumento de Irving Block, Jack Rabin. Fotografía: Floyd Crosby. Música: Walter Greene. Montaje: Irene Morra. Dirección artística: Daniel Haller. FX: Irving Block, Louis DeWitt, Jack Rabin. Intérpretes: Dick Miller (Dave Boyer), Susan Cabot (Sybil Carrington), Richard Devon (Dr. Pol Van Ponder), Eric Sinclair (Dr. Howard Lazar), Michael Fox (Jason ibn Akad), Robert Shayne (Cole Hotchkiss), Jered Barclay (John Compo), John Brinkley (tripulante), Tony Miller, Bruno VeSota (Mr. LeMoine), Jay Sayer (Jay), Mitzi McCall (Mitzi), Roy Gordon (Presidente), Beach Dickerson (tripulante armado), Jim Knight, Roger Corman (control en Tierra). Nacionalidad y año: Estados Unidos 1958. Duración y datos técnicos: 66 min. – B/N – 1.37:1 – 35 mm.

 

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A finales de los años cincuenta la palabra «satélite» estaba de moda, y era de uso frecuente en la jerga aeroespacial. Entre el público de la calle era común, y tenía connotaciones futuristas, con lo cual muchas piezas de ciencia ficción usaban esa palabra. Por poner un ejemplo, en España, la clásica novela de Jules Verne La caza del meteoro (La chasse au météore, 1908) fue reeditada en 1960 como La caza del satélite. Así pues, esta película se vendió gracias a ese título un tanto inexacto.

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La premisa inicial recuerda a Ultimátum a la Tierra (The Day the Earth Stood Still, 1951), con el tema de advertencia a nuestro planeta por parte de potencias extraterrestres de que no estamos preparados para esparcir nuestra simiente guerrera por el espacio. Sin embargo, el mensaje de paz que ofrecía el film de Robert Wise aquí ha desaparecido, y los extraterrestres tienden a hacer uso de aquello que critican, es decir, no dudan en matar con el fin de defender sus «principios».

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La película es un tanto tristona y gris, y el motivo de ello es, sin duda, su escaso presupuesto, que ofrece excesivas conversaciones entre políticos en el edificio de las Naciones Unidas —sí, muchos planos de archivo—. Y, una vez efectuado el vuelo espacial, los personajes se pasan gran parte del metraje paseando por los pasillos del cohete para ir a conversar unos con otros.

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Pese a ello, dispone de algunos detalles que brindan cierto interés. Los astronautas se comunican entre sí por medio de dispositivos que tienen situados en el cuello. Dick Miller es el protagonista, pero interpreta a un currito más dentro del proyecto científico, y no es el aguerrido capitán del vuelo, como suele ser costumbre en este tipo de filmes. De hecho, el capitán ha sido reemplazado por un extraterrestre, que tiene la capacidad de subdividirse, como si fuera una ameba. Atención a la última de las divisiones, donde el aspecto demacrado —efectuado simplemente con sombra en los ojos— aporta al personaje un aspecto de vampiro, efecto potenciado por el físico del actor Richard Devon. Ese personaje, el extraterrestre infiltrado, es un duplicado no humano, y cuando el doctor intenta examinarle para comprobar su condición, el alienígena se creará un corazón, con el fin de que el médico no detecte nada extraño. Pero ahora, disponiendo de corazón, se ha vuelto humano, y se enamora de Susan Cabot.

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Una película, en fin, muy menor, pero que no disgusta, y es una de las tantas que Roger Corman realizó en los cincuenta, y las cuales supusieron una ejercitación para después; en los sesenta ya realizó filmes con más empaque, como su ciclo de adaptaciones de Edgar Allan Poe, arrancando con la extraordinaria La caída de la Casa Usher (The Fall of the House of Usher, 1960).

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Anécdotas

  • Título en México: Guerra de satélites. Título en Venezuela: La guerra de los satélites.
  • En un momento determinado se ve un titular de un periódico en español, pero pone la palabra «projecto» en lugar de «proyecto».
  • Desde el momento en que la película fue concebida hasta que se proyectó en los cines pasaron solo ocho semanas.
  • El presupuesto fue de 70.000 dólares.
  • El panel de control con numerosos interruptores de palanca utilizado por el controlador de tierra y la tripulación de vuelo de la nave espacial es el piloto automático de un bombardero B-17 de la Segunda Guerra Mundial.
  • Estrenada en Estados Unidos el 18 de mayo de 1958. En España jamás se ha visto.

Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)

CALIFICACIÓN: **

  • bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra