Harrington High padece de algunos de los típicos problemas que suelen tener la mayoría de los institutos públicos: unos cuantos alumnos problemáticos, un presupuesto exiguo para acometer las medidas necesarias o el de unos profesores desbordados. Sin embargo, Harrington High está a punto de enfrentarse con algo con lo que no se ha topado nunca.
Dirección: Robert Rodríguez. Producción: Dimension Films, Los Hooligans Productions para Miramax International. Productores: Elizabeth Avellan, Robert Rodriguez. Productores ejecutivos: Bob Weinstein, Harvey Weinstein. Productora asociada: Tamara Smith. Guion: Kevin Williamson, según argumento de David Wechter y Bruce Kimmel. Música: Marco Beltrami. Fotografía: Enrique Chediak. Diseño de producción: Cary White. Montaje: Robert Rodríguez. FX: KNB EFX Group, Hybride Technologies, Threshold Digital Research Labs, Digiscope, Centropolis Effects, Cinema Production Services, Rhythm & Hues Studios, XFX Images. Intérpretes: Jordana Brewster (Delilah Profitt), Clea DuVall (Stokely ‘Stokes’ Mitchell), Laura Harris (Marybeth Louise Hutchinson), Josh Hartnett (Zeke Tyler), Shawn Hatosy (Stan Rosado), Salma Hayek (enfermera Rosa Harper), Famke Janssen (señorita Elizabeth Burke), Piper Laurie (señora Karen Olson), Christopher McDonald (señor Frank Connor), Bebe Neuwirth (directora Valerie Drake), Robert Patrick (entrenador Joe Willis), Usher Raymond (Gabe Santora), Jon Stewart (profesor Edward Furlong), Daniel von Bargen (señor John Tate), Elijah Wood (Casey Connor), Susan Willis (señora Jessica Brummel), Pete Janssen (Eddie McIvey), Tina Rodriguez (chica del tatuaje), Harry Jay Knowles (señor Knowles), Donna Casey (Tina), Louis Black (señor Lewis), Jim Johnston (profesor), Libby Villari (madre de Casey), Mike Lutz (Hornet Mascot), Douglas Aarniokoski (entrenador Brum)… Nacionalidad y año: Estados Unidos 1998. Duración y datos técnicos: 104 min. Color 1.85:1.
Aunque las películas de terror con adolescentes han existido desde hace tiempo, Scream – vigila quién llama (Scream, 1996), dirigida por Wes Craven, que supuso el resurgimiento de este subgénero en su momento, llegó a acaparar gran parte de las pantallas de cine de medio mundo, obteniendo grandes beneficios en taquilla. El guion, por parte de Kevin Williamson, fue uno de los principales artífices de dicho logro.
En 1990, David Wechter y Bruce Kimmel escribieron un primer borrador del guion de The Faculty, pero a nadie le interesó. No fue hasta después del éxito de Scream cuando Miramax compró el guion y se puso a trabajar en la producción. Bob Weinstein y Harvey Weinstein contrataron a Kevin Williamson para trabajar en dicho libreto, manteniendo la historia básica, pero reescribiendo el diálogo y agregando nuevos personajes para hacerlo más moderno.
El guionista de Sé lo que hiciste el último verano (I Know What You Did Last Summer, Jim Gillespie, 1997) vuelve a repetir algunas de las constantes que le funcionó en el film de Wes Craven, o sea, adolescentes en problemas dentro de un entorno educativo, protagonismo coral, guiños cinéfilos y hasta parece replicar cierta estructura. Eso sí, el género slasher es modificado por el tema de la invasión alienígena, la cual bebe directamente de algunos de los clásicos de la ciencia ficción. Es como un cruce entre una re-lectura, en clave juvenil, de La invasión de los ladrones de cuerpos (Invasion of the Body Snatchers, Don Siegel, 1956) y otra cinta como Curso 1999 (Class of 1999, Mark L. Lester, 1990).
Originalmente, el propio Kevin Williamson iba a dirigir la película, pero lo rechazó para poder dirigir su guion de Secuestrando a la Srta. Tingle (Teaching Mrs. Tingle, 1999). Los Weinstein entonces contrataron a Robert Rodríguez para ponerse tras las cámaras, que lograba dar un pasito más a la hora de afianzarse en la industria hollywoodiense. Antes había dirigido El Mariachi (El Mariachi, 1992), Desperado (Desperado, 1995), un cruce entre secuela y remake de la primera, y, por último, un sketch en Four Rooms (Four Rooms, 1995) y Abierto hasta el amanecer (From Dusk Till Dawn, 1996), ambas junto a su buen amigo Quentin Tarantino.
Al igual que pasaba en Scream, la historia arranca con un prólogo eléctrico donde deja bien a las claras que este curso va a ser bastante diferente. En este caso, dos de las figuras más significativas dentro de cualquier instituto norteamericano son puestas en peligro, subrayando ese sentimiento de indefensión por parte del resto del profesorado y de todo el alumnado. La amenaza se hace manifiesta y la inquietud cobra vida.
El grupo de protagonistas, al que algunas voces han emparentado con El club de los cinco, está formado por estereotipos de jóvenes que parecen transitar por cualquier instituto norteamericano al uso, así nos encontramos con el típico outsider, la rarita, el quaterback, la capitana del equipo de animadoras o el pringado de turno. Curiosamente, son personajes estereotipados que parecen rebelarse, de alguna manera u otra, contra ellos mismos: así el quaterback quiere valerse por sí mismo en los estudios sin tener que servirse de su beca deportiva, el pringado parece contener dentro de sí un verdadero guerrero…
El reparto no es precisamente de lo más reseñable, nadie parece destacar demasiado sobre los demás, aunque algunos están algo más atinados que otros, como es el caso de Elijah Wood (actor que luego encarnará al menudo personaje de Frodo Bolsón). Como anécdotas, tenemos la participación de Piper Laurie, la castrante madre en Carrie (Carrie, Brian De Palma, 1976), como profesora, o a Robert Patrick, el implacable T-1000 de Terminator 2: El juicio final (Terminator 2: Judgment Day, James Cameron, 1991), dando vida al entrenador del equipo de fútbol americano, atisbándose cierto talante del temible enemigo líquido.
Los guiños a las películas de Siegel y de Kaufman están más que claros, no solo por su premisa general y por determinadas situaciones que se dan, sino porque explícitamente se cita por boca de uno de los personajes, que incluso se atreve a comentar que el libro de Jack Finney está basado en Amos de títeres (The Puppet Masters, 1955), de Robert A. Heinlein. Existen otros guiños a clásicos del género: aquel instante cómico donde un cuerpo decapitado busca torpemente su testa perdida sin mucho éxito, que parece evocar los movimientos torpes del tronco descabezado del doctor Carl Hill en Re-Animator (Re-Animator, Stuart Gordon, 1985), o la de esa misma cabeza con vida propia, que recuerda a la de La cosa (The Thing, 1982). Precisamente, el espíritu de este film vuelve a sobrevolar en la escena donde se intenta identificar quién del grupo no es humano, que evoca a la agobiante secuencia de la prueba de la sangre en la obra maestra de John Carpenter, aunque esta vez con cierta chanza, al usar la droga como elemento para poder revelar la identidad.
El grupo se enfrenta al peligro extraterrestre, mientras saltan chispas y se liman asperezas entre algunos de los integrantes del mismo, y entre escaramuza y escaramuza, se llega al enfrentamiento final, con giro incluido más que previsible, que tiene lugar en uno de los sancta sanctorum de todo instituto norteamericano: el gimnasio.
Si en otras películas nos hemos topado con algunas de las maneras más singulares de acabar con la amenaza exterior —se me vienen a la cabeza los microbios en La guerra de los mundos (The War of the Worlds, Byron Haskin, 1953), la reproducción de un viejo vinilo en Mars Attacks! (Mars Attacks!, Tim Burton, 1996) o el de un virus informático en Independence Day (Independence Day, Roland Emmerich, 1996)— la forma de secar a los organismos extraterrestres en la presente no se queda atrás.
Los efectos especiales están bastante logrados. A destacar los diseños del renacuajo encontrado en el césped del campo de fútbol, o el del monstruo, una evolución del primero, que es mostrado en las sombras y que parece amoldarse al siempre sugestivo imaginario lovecraftiano, pero que luego se presenta en toda su plenitud, y que se asemeja más a un cruce entre un dragón y un monstruo abisal. Un momento bastante simpático, y algo descarado, es aquel donde los componentes del equipo de fútbol muestran su verdadera naturaleza, y parecen beber al unísono bajo la lluvia.
La banda sonora, aunque correcta, se antoja algo reducida debido al uso y abuso de una serie de temas bastante conocidos —entre los grupos que suenan están Oasis, Garbage y The Offspring (también una versión del famoso tema Another brick in the wall, de Pink Floyd)— que, por desgracia, no refuerzan la atmósfera del momento, sino que son usados directamente como sustitutos en la creación de la misma.
En definitiva, estamos ante un film que divierte, ágil en su desarrollo, respaldado por sus múltiples guiños, con un tono entre desenfadado y gamberro, con sus dosis de acción, pero que desgraciadamente se queda solo en eso. No llega nunca a trascender el material de partida (cosa que, por ejemplo, sí entiendo que pasa con Scream, en la que subyace cierta reflexión, más o menos acertada, sobre los clichés en el cine slasher). El desarrollo de sus personajes es demasiado esquemático, en parte debido a un protagonismo demasiado coral, flaco favor a la hora de dotar de cierta dimensión a cada uno de sus personajes.
Anécdotas
- Título en Argentina, México, Perú, Uruguay y Venezuela: Aulas peligrosas.
- Título de rodaje: Feelers.
- En 1999, la Academy of Science Fiction, Fantasy & Horror Films la nominó como mejor película y mejor interpretación de actor/actriz joven (Josh Hartnett).
- El papel de Delilah fue escrito originalmente para Charisma Carpenter. Esta lo rechazó porque creía que era demasiado similar a su personaje de Cordelia en Buffy, cazavampiros. Precisamente, Sarah Michelle Gellar, la estrella de la serie, también rechazó este mismo. Jessica Alba fue otra de las posibles candidatas para haber interpretado el papel de Delilah Profitt que finalmente llevó a la pantalla Jordana Brewster. Precisamente, la película supuso el debut de esta.
- Gillian Anderson no quiso dar vida a Valerie Drake, la directora del centro, papel que finalmente fue interpretado por Bebe Neuwirth.
- Famke Janssen reveló en 2016 que nunca ha visto la cinta, ya que no quiso ver el (horrible) final de su personaje en la misma.
- El rodaje tuvo lugar en Austin (Texas).
- La película tuvo un presupuesto estimado de 15.000.000 de dólares y recaudó más de 40.000.000 solo en Estados Unidos.
- Originalmente en la película había otro personaje llamado Venus que fue interpretado por Kidada Jones. Esta salía en unas cinco escenas, siendo todas cortadas en el montaje final.
- Cada uno de los protagonistas de la película tiene un personaje que le representa en El club de los cinco. A Stan le representaría Andy, Delilah sería Claire, Casey sería Brian, Zeke sería Bender y Stokely podría ser Allison.
- Estrenada en Estados Unidos el 25 de diciembre de 1998 de forma masiva, tras un par de premieres. En España se estrenó el 31 de marzo de 1999.
Jesús Mayoral Velázquez de Castro (Sevilla, España).
CALIFICACIÓN: **
- bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra