Al principio de los tiempos, la Tierra carecía de Luna. El Sol, considerado un benefactor, recibía sacrificios humanos por parte de una tribu, que les entregaba a aquellas doncellas cuyos cabellos fuesen dorados. Una de ellas, Sanna, logra salvarse del sacrificio ante un cataclismo cuando la Tierra atrapa un satélite, y vagando va a parar…