Estados Unidos está combatiendo en Moldavia cuando algo extraño ataca a sus soldados, visible apenas por medio de unos visores especiales que llevan acoplados. Un científico de Estados Unidos, inventor de esos visores, es enviado al lugar con el fin de averiguar el origen de esos ataques, que parecen producidos por algún tipo de criatura sobrenatural.
Dirección: Nic Mathieu. Producción: Legendary Entertainment, Mid Atlantic Films, Netflix. Productores: Jillian Share, Thomas Tull. Productor delegado: Guy Riedel. Productor asociado: Udi Nedivi. Guion: George Nolfi, según una historia de Ian Fried, Nic Mathieu. Fotografía: Bojan Bazelli. Música: Junkie XL [acreditado como Tom Holkenborg]. Montaje: Jason Ballantine. Diseño de producción: Tom Meyer. FX: Weta Digital, Hydraulx, Vitality Visual Effects (efectos visuales), Weta Workshop (vestuario especial y adminículos). Intérpretes: James Badge Dale (Clyne), Emily Mortimer (Fran Madison), Bruce Greenwood (general Orland), Max Martini (capitán Sessions), Cory Hardrict (Alessio), Clayne Crawford (sargento Toll), Gonzalo Menendez (capitán Marco Cabrera), Ursula Parker (Sari), Aaron Serban (Bogdan), Dylan Smith (Talbot), Louis Ozawa (sargento Chen), Jimmy Akingbola (sargento Steve McFadden), Ryan Robbins (sargento Comstock), Stephen Root (Dr. Mindala), Philip Bulcock (sargento Chris Davis), Royce Pierreson (sargento Lilo Diaz), Declan Hannigan, Mark O’Neal, Mike Bodie, Peter Schueller, Zoltan Teglas, Geoffrey Thomas, Thomas Kelly, Zalan Sipos… Nacionalidad y año: Estados Unidos, Hungría 2016. Duración y datos técnicos: 107 min. color 2.35:1.
Debo reconocer que tengo especial debilidad por los pastiches de géneros. En esta ocasión, tenemos una mezcla entre el bélico y la ciencia ficción, con ciertos elementos de suspense y terror, envuelto todo ello en una estructura de cine de acción. El proyecto fue anunciado inicialmente en enero de 2014, por parte de Legendary Pictures en unión a Universal, informando que supondría el debut en el cine del director de spots publicitarios Nic Mathieu. En agosto comenzó el rodaje, en diversas calles y edificios de Budapest, en Hungría, recurriendo en particular a efectos prácticos, lo cual le otorgaba una autenticidad y atmósfera muy apreciables. La compañía perteneciente a Peter Jackson Weta Workshop diseñó las armas futuristas, y Weta Digital creó los efectos digitales. El estreno estaba previsto en cines por parte de Universal en agosto de 2016, pero se echó atrás finalmente y cedió el film a Netflix. Con todo, el origen cinematográfico del proyecto se podría detectar por los créditos finales, demasiado pequeños para ser leídos en un producto destinado a televisión.
El guion original fue debido al debutante Ian Fried[1], que luego fue reescrito por el director, Jamie Moss, John Gatins y George Nolfi[2], quedando acreditado como guionista únicamente Nolfi, con Mathieu y Fried recibiendo crédito de argumentistas. El protagonista es Clyne (James Badge Dale), un científico que, al empezar la película, está desarrollando un arma de defensa, elemento que deja bien claro, y que consiste en una especie de cañón que hace aumentar la temperatura, lo cual inhabilita muchos bienes enemigos, pero el equipo del gobierno que está presente le pregunta si lo ha usado con seres humanos. El hecho de que Estados Unidos esté en ese mismo momento en un frente bélico en Moldavia ―los americanos, siempre metiéndose en todas partes―, y que algo extraño ha sucedido allí, sirve como excusa para quitárselo de encima y enviarlo a ese sitio, con el fin de que investigue lo que ha acontecido.
El hecho es que una especie de fuerza sobrenatural está eliminando a los soldados. Es invisible, y solo puede ser vista a través de un visor especial que inventó Clyne, así pues desarrolla una especie de cañón que aumenta la facultad de visión, con el fin de desentrañar el origen de los ataques. Ante el aumento de definición, parece tratarse de una especie de criaturas humanoides, que se mueven a enorme velocidad y congelan el interior del ser humano. Los habitantes del lugar lo identifican con algún tipo de espectro, acaso soldados muertos anclados entre este mundo y el siguiente, y que se están vengando de lo cruento de la lucha en sus causantes. Pero el científico lo relacionará con algo llamado “condensado de Bose-Einstein”, un estado de la materia con la temperatura cercana al cero absoluto.
La trama es bastante atrayente, y mantiene la expectación en todo momento, haciendo que la sigas con interés y sin que en ningún momento te veas tentado de mirar el reloj. El enigma acerca de lo que está sucediendo se mantiene durante gran parte de la historia, y cuando ello se desvela, sigue manteniendo la atención, y deja al espectador atrapado hasta prácticamente el final. Gran parte de la virtud del film estriba en sus escenarios, que se ven tan auténticos, y que parecen lugares reales de alguna contienda bélica. Los personajes, por supuesto, son esquemáticos, y conducen únicamente la narración. Es sorprendente, por cierto, que solo haya una mujer (la agente Fran Madison: Emily Mortimer) en el reparto ―más adelante aparece una niña y, justo al final, dos o tres enfermeras atendiendo soldados heridos―, una agente de la CIA que está investigando el asunto, cuando, ambientado el film en un futuro cercano, el que hubiera féminas entre la soldadesca, o el alto mando, sería bastante lógico. En todo caso, en el reparto contamos con la siempre agradecida presencia de Bruce Greenwood como el general Orland.
Las escenas de acción funcionan bastante bien y Nic Mathieu dirige el conjunto con solvencia, aunque a veces caiga en la tentación de usar recursos tópicos en este tipo de cine, como es la cámara lenta, los planos de gente gritando sin que se les oiga pero sí los efectos de sonido, las fugas de luz… En todo caso, son males menores que no enturbian una película sencilla y efectiva, que no pasará a los anales del género, pero que al menos entretiene con honestidad.
Anécdotas
- Rodada con un presupuesto estimado de setenta millones de dólares, tuvo lugar en diversas localidades de Hungría y Eslovaquia.
- Joachim Rønning y Espen Sandberg iban a dirigir, pero se retiraron y Nic Mathieu los reemplazó.
- El 1 de febrero de 2017 Netflix estrenó una precuela en formato cómic de la película llamada Spectral: Ghosts of War, conseguible a través de la website ComiXology.
- Estrenada en Estados Unidos y en España el 9 de diciembre de 2016, vía internet (Netflix).
Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)
CALIFICACIÓN: **½
- bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra
[1] Ahora está involucrado en un film titulado The Ever After Murders, ambientado en un mundo habitado por los personajes de los cuentos infantiles, y donde Pulgarcito y Caperucita Roja investigan una conspiración.
[2] Debutó con Timeline (Timeline, 2003), de Richard Donner, y también ha participado en Ocean’s Twelve: Uno más entra en juego (Ocean’s Twelve, Steven Soderbergh, 2004), La sombra de la sospecha (The Sentinel, Clark Johnson, 2006), El ultimátum de Bourne (The Bourne Ultimatum, Paul Greengrass, 2007), Destino oculto (The Adjustment Bureau, 2011) y El banquero (The Banker, 2020), dirigidas por él mismo.