Egipto, 1895. John Banning trabaja en unas excavaciones arqueológicas junto a su padre y su tío, pero una lesión en una pierna le impide entrar en la tumba de la sacerdotisa Ananka. Algo sucede y el padre de John se vuelve loco. Tres años después, en Inglaterra, un egipcio llega a la localidad donde reside John, y cerca del manicomio donde está recluido su padre.

Dirección: Terence Fisher. Producción: Hammer Film Productions. Productor: Michael Carreras. Productor asociado: Anthony Nelson Keys. Guion: Jimmy Sangster. Fotografía: Jack Asher. Música: Franz Reizenstein. Montaje: Alfred Cox. Diseño de producción: Bernard Robinson. FX: Roy Ashton (maquillaje). Intérpretes: Peter Cushing (John Banning), Christopher Lee (la momia / Kharis), Yvonne Furneaux (Isobel / Ananka), Eddie Byrne (inspector Mulrooney), Felix Aylmer (Stephen Banning), Raymond Huntley (Joseph Whemple), George Pastell (Mehemet Bey), Michael Ripper (cazador furtivo), George Woodbridge (agente de policía), Harold Goodwin, Denis Shaw, Gerald Lawson, Willoughby Gray, John Stuart, David Browning, Frank Sieman, Stanley Meadows, Frank Singuineau, James Clarke, John Harrison, Frederick Rawlings… Nacionalidad y año: Reino Unido 1959. Duración y datos técnicos: 85 min. color 1.66:1.

 

Tras los éxitos de La maldición de Frankenstein (The Curse of Frankenstein, 1957) y Drácula (Dracula, 1958), la Hammer llegó a un acuerdo oficial con la Universal para realizar remakes de sus películas clásicas de terror. La momia (1959) fue el primero de esos films. En teoría, se trataba de una nueva versión de la cinta homónima dirigida por Karl Freund en 1932, pero podría decirse que en realidad era una fusión entre ésta y la tetralogía posterior protagonizada por la momia Kharis. Así, todo el arranque procede del film de Freund, a continuación ofrece ciertas similitudes con la primera del ciclo Kharis, The Mummy’s Hand (1940), y el resto es prácticamente una relectura de The Mummy’s Ghost [dvd: El fantasma de la momia, 1944], apresando los personajes masculinos de The Mummy’s Tomb [dvd: La tumba de la momia, 1942].

Todo este batiburrillo lo perpetra Jimmy Sangster, ya habitual de la casa, con cierta solidez en la creación de personajes, si bien en ese sentido cabe apuntar que la calidad de los actores ayuda a la credibilidad de éstos: la declaración ante la policía del cazador furtivo interpretado por Michael Ripper hubiera sido inverosímil de no ser por la competencia del excelente actor secundario. El protagonismo de Peter Cushing, por supuesto, brinda la misma gran altura habitual en este extraordinario actor, si bien cabe decir que Christopher Lee parece un actor con demasiado empaque para el escaso cometido que se le exige en la presente; en todo caso, debe señalarse la enorme fuerza del plano de la mirada que la momia dedica al egipcio Mehemet Bey cuando éste le ordena que mate a Isobel.

Terence Fisher dirige el conjunto con la elegancia que lo caracteriza, haciendo uso, como siempre, de los decorados como un personaje más, desde el principio con la excavación (atención a esos maravillosos verdes que iluminan la tumba de Ananka), pasando por el flashback en Egipto, hasta las escenas ambientadas en Inglaterra, así la casa de John Banning, el instituto mental o, sobre todo, los exteriores, con los bosques umbríos y el pantano cenagoso. El personaje de Peter Cushing es de un notorio interés: prácticamente no muestra emoción alguna ante, primero, la locura de su padre y, después, su muerte; en un par de ocasiones clama que no reprocha a su progenitor su cojera, pero su comportamiento parece contradecir esas afirmaciones. Las escasas muestras de amor que brinda a su bella esposa también son un elemento a tener en cuenta.

El espectador actual es consciente de la altura (física) de Christopher Lee. Sin embargo, Fisher lo rueda siempre en una posición superior al resto de los personajes, aprovechando en ocasiones la perspectiva, para de ese modo acrecentar el aura de amenaza que proyecta la momia. No en vano, en un momento dado, el cazador furtivo explicará que tiene una altura “de tres metros” (aunque después se corregirá).

Esta era la primera película de la temática de momias que hacía uso del color. Como es norma en la Hammer, el tecnicolor luce de una manera espléndida. Ya se ha mencionado antes la escena de la tumba de Ananka, pero todos esos decorados también citados se ven ensalzados por el tratamiento fotográfico que Jack Asher les brinda, con unas texturas brillantes y aterciopeladas.

Acaso esta película no alcance los niveles de portento que, por esa época, Terence Fisher rodó para la Hammer, tales como Drácula, The Revenge of Frankenstein, Las novias de Drácula o la menos conocida The Man Who Could Cheat Death, pero ello no es óbice para reconocer su gran valía plástica y lúdica, la enorme fuerza que detenta y, sobre todo, el talento interpretativo que despliega.

 

Anécdotas

  • Título de rodaje: Terror of the Mummy.
  • El rodaje tuvo lugar entre el 23 de febrero y el 16 de abril de 1959.
  • La escena de la amputación de la lengua era más explícita, pero la propia Hammer se auto-censuró, aunque existen fotografías del rodaje.
  • Estrenada en el Reino Unido el 25 de septiembre de 1959. En España se estrenó el 17 de noviembre de 1960, en el cine Rex de Madrid.

 

Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)

 

CALIFICACIÓN: ***

  • bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra