Un moribundo John Vincey hace llamar a su sobrino Leo para que, acompañado por su ayudante Holly, descubra el secreto que envuelve a su familia. Solo dispone de una estatuilla, y sabe que sus antecesores llegaron a algún sitio más al norte de Siberia, donde puede hallarse el secreto de la inmortalidad. Hacia allí se dirigen, encontrándose con el reino perdido de Kor, regido por Ella, la que debe ser obedecida.
Dirección: Irving Pichel, Lansing C. Holden. Producción: Merian C. Cooper Productions para RKO Radio Pictures. Productor: Merian C. Cooper [sin acreditar]. Productora asociada: Shirley Burden [sin acreditar]. Guion: Ruth Rose, con diálogos adicionales de Dudley Nichols, basado en la novela de H. Rider Haggard. Fotografía: J. Roy Hunt. Música: Max Steiner; [Bernhard Kaun, música adicional, sin acreditar]. Montaje: Ted Cheesman. Dirección artística: Van Nest Polglase. FX: Carl Axzelle, Robert J. Schiffer (maquillaje), Harry Redmond Sr. (supervisor de efectos especiales), Harry Redmond Jr. (efectos especiales), Vernon L. Walker (efectos fotográficos), Linwood G. Dunn (efectos ópticos), Guy Newhard (fotografía matte). Intérpretes: Helen Gahagan (Ella, la que debe ser obedecida / reina Hash-A-Mo-Tep), Randolph Scott (Leo Vincey), Helen Mack (Tanya Dugmore), Nigel Bruce (profesor Horace Holly), Gustav von Seyffertitz (Billali, el primer ministro), Lumsden Hare (Dugmore), Noble Johnson (jefe Amahaggar), Jim Thorpe (capitán de la guardia), Julius Adler (Sumo Sacerdote), Arnold Gray (sacerdote), Samuel S. Hinds (John Vincey), Bill Wolfe (sacerdote), Ray Corrigan (guardia), Jerry Frank (guardia), Eli Mintz… Nacionalidad y año: Estados Unidos 1935. Duración y datos técnicos: 101 min. [estreno original] / 95 min. [reposición de 1949] – B/N – 1.37:1 – 35 mm.
La novela Ella (She, 1887), de Sir Henry Rider Haggard, es un clásico de la literatura de aventuras. Fue escrita en seis semanas entre febrero y marzo de 1886, originalmente se serializó dentro de la revista The Graphic entre octubre de 1886 y enero de 1887, y luego editada en forma de libro por Longmans. Haggard se inspiró en sus experiencias mientras servía como secretario del teniente gobernador de Natal, en Sudáfrica, en 1875. Algunos estudiosos han visto similitudes entre esta novela y unas cuantas de Edward Bulwer-Lytton, como A Strange Story (1862), donde aparece una misteriosa mujer con un velo llamada Ayesha, o La raza futura / La raza que nos aniquilará / La raza venidera / Vril, el poder de la raza futura / Vril, el poder de la raza venidera (The Coming Race, 1871), que plantea el tema de la civilización perdida. De todos modos, después, La Atlántida (L’Atlantide, 1919), de Pierre Benoit, fue acusada de inspirarse en esta.
Tras diversas adaptaciones mudas (véase anecdotario) la Universal compró los derechos del libro para hacer una versión cinematográfica, y en julio de 1932 se anunció la puesta en marcha del proyecto. El guion pasó a manos de John L. Balderston, habitual de la casa, que cambió el final, haciendo que todos los personajes murieran. El presidente de la compañía, disgustado, vendió los derechos, que pasaron a manos de Merian C. Cooper, quien encargó un nuevo guion a Ruth Rose, esposa de su colega Ernest B. Schoedsack, y frecuente en el equipo. Para evitar las connotaciones raciales del original, pues el Código Hays de censura había empezado a actuar de forma contundente, se cambió la ambientación original del libro en África y se trasladó a una zona indeterminada del Polo Norte.
Hay más cambios con respecto al original, como que Ella no luzca el nombre de Ayesha, sino el de Hash-A-Mo-Tep, de obvias resonancias egipcias. Para ese papel se contrató a Helen Gahagan, una actriz de teatro (y cantante de ópera) de gran prestigio, en esta su primera… y última película. El film representó un gran fracaso comercial en la época, y ella se retiró, entrando en política, desarrollando una activa carrera dentro del partido demócrata. Cuando se presentó a las elecciones al Congreso, intentó comprar todas las reproducciones de la cinta que aún existían para que no quedara rastro de su actuación. La película se dio por perdida durante mucho tiempo, pero Buster Keaton conservaba una copia en su garaje. Cuando el historiador Raymond Rohauer se puso a restaurar la obra del cómico, este le pasó la cinta para que la preservara.
Desde luego, si algo llama la atención en el film es su ambientación ártica, que le da un ambiente peculiar. El plano del tigre dientes de sable congelado en el hielo es apasionante. Después, el diseño de la ciudad perdida de Kor es igualmente cautivante, mezclando el estilo Art Deco con resonancias egipcias, griegas y mayas. Todo esto, junto a las abundantes y hermosas pinturas matte, es lo mejor de la obra.
El problema de La diosa del fuego (She, 1935) es que no termina de arrancar. El inicio ofrece la reunión entre el joven Leo Vincey, su tío moribundo (en la novela, padre, aquí cambiado para justificar la nacionalidad de Randolph Scott) y el secretario de este, Horace Holly. Se pasan mucho, demasiado rato hablando, para poner en situación al espectador. Después, una vez iniciado el viaje, comienza a desarrollarse el sentido de la maravilla, con los amplios planos de los desiertos helados y los grandes riscos, así como el citado instante del tigre y el hombre congelados. La llegada al reino perdido de Kor es también impresionante, con enormes esculturas adornando salas inmensas. Pero después, la acción se entumece de nuevo.
La dirección corresponde al también actor Irving Pichel, quien ya trabajara para el equipo Schoedsack/Cooper en la estupenda El malvado Zaroff (The Most Dangerous Game, 1932), su debut en este campo, y donde fue acompañado en el cargo por Schoedsack. Aquí también tiene asistencia, en este caso por parte de Lansing C. Holden, un diseñador que le ayuda a coordinar todas las escenas de decorados inmensos que hay que manejar. De hecho, amén de ese cargo, también desarrolló en el film el de «ilustrador de producción», sin quedar acreditado, dentro de un equipo muy amplio. Holden tuvo una exitosa participación en la Primera Guerra Mundial. Después se especializó en Bellas Artes y se graduó en arquitectura. Participó escasamente con el mundo del cine en la década de los años treinta, gracias a la invitación por parte de Cooper. Después se incorporó a la Guardia Nacional y en 1938 murió al estrellarse su avión.
Pichel dirige intentando controlar la magnificencia visual del film, el agarrotado guion y las interpretaciones, que ha de resaltarse que no son muy destacadas en ninguno de los casos. Randolph Scott aparece muy bisoño, Nigel Bruce recita los diálogos de carrerilla, sin implicarse emocionalmente, y Helen Gahagan parece creer que sigue en el teatro, declamando con pompa. Así, quien más fresca y espontánea aparece es Helen Mack —a quien ya vimos en El hijo de Kong (The Son of Kong, 1933) y otras producciones del equipo Schoedsack/Cooper—, pese a aportar un personaje bastante fastidioso.
Hay ocasiones en que Pichel intenta narrar por medio de la cámara, con potentes travellings de aproximación, y también hay un bellísimo plano de Ella cuando Leo despierta, y en que parece que el velo que la mujer porta se difumina. Eso, junto a momentos épicos —magnífica la secuencia del abismo que han de salvar saltando—, amén del peculiar exotismo, otorga al film una belleza y fulgor cautivantes, pero deja en aguas de borrajas lo que una cinta con estos elementos podría haber deparado.
Anecdotario
- Título en Argentina y México: La diosa del fuego.
- En 1936 fue nominada al Oscar en la categoría de «mejor dirección de danza», para Benjamin Zemach por el número «Hall of Kings».
- Este film figura entre las cien películas más malas jamás realizadas en el libro The Official Razzie Movie Guide, del fundador de los premios Golden Raspberry, John Wilson.
- Producida entre marzo y mayo de 1935, con rodaje en los estudios Prudential, de Los Ángeles, y los RKO-Pathé, de Culver City, en California.
- En una reposición de 1949 su metraje original de 101 minutos fue reducido a 95 minutos.
- Existen también dos versiones, en 2006 y en 2007, atrozmente coloreadas.
- Tanto decorados como vestuario se diseñaron para rodar el film en color. Sin embargo, a última hora la RKO redujo el presupuesto y se rodó en blanco y negro.
- La puerta de entrada al reino de Kor es la famosa de King Kong (1933), pero también apareció en otros filmes.
- En la escena del juicio del Pueblo de las Cavernas, el vestuario de Ella inspiró el de la reina malvada de Blancanieves y los siete enanitos (Snow White and the Seven Dwarfs, David Hand et al, 1937).
- La RKO quería a Joel McCrea y Frances Dee para los papeles principales, pero no pudo conseguirlos.
- Es muy posible que Marcel Delgado fuera el responsable de los muñecos animados que representan a las personas que caen por el abismo.
- La música de la presente la recicló Max Steiner parcialmente para Los últimos días de Pompeya (The Last Days of Pompeii, Ernest B. Schoedsack, Merian C. Cooper, 1935).
- Versiones de la novela:
La columna de fuego (La colonne de feu / La danse du feu, Georges Méliès, 1899) [Francia; CM].
La flamme merveilleuse (Georges Méliès, 1903) [Francia; CM].
She (Edwin S. Porter, 1908) [EEUU; CM].
She (George Nichols, 1911) [EEUU; CM].
His Egyptian Affinity (A. E. Christie, 1915) [EEUU; CM; parodia].
She / Hidden Valley[1] (William Barker, Horace Lisle Lucoque, 1916) [RU];
She (Kenean Buel, 1917) [EEUU].
She / Mirakel der Liebe (Leander De Cordova, G.B. Samuelson, 1925) [RU, Alemania].
La diosa de fuego (She, Lansing C. Holden, Irving Pichel, 1935) [EEUU].
Malika Salomi (Mohammed Hussein, 1953) [India].
La diosa de fuego (She, Robert Day, 1965) [Reino Unido].
The Vengeance of She [tv/dvd: La venganza de la diosa de fuego, Cliff Owen, 1968] [Reino Unido; secuela de la previa].
The Virgin Goddess (Dirk Du Villiers, 1973) [Sudáfrica].
Ella (She, Peter Thornton, 1980) [miniserie TV; 8 episodios; Sudáfrica].
The Lost City (Robert Dukes, 1982) [Reino Unido, Canadá].
She (She, Avi Nesher, 1984) [Italia].
She (Timothy Bond, 2001) [Canadá, RU, Bulgaria, Italia].
- Estrenada en Estados Unidos el 12 de julio de 1935 y en España el 15 de noviembre de 1935, en Barcelona, y el 11 de enero de 1936, en Madrid.
Bibliografía
Ella; por H. Rider Haggard; traducción de Sonia Tribaldos; introducción de Alfredo Lara López; ilustración de la cubierta, Frantisek Kupka. Madrid: Valdemar, 1998. Colección: El Club Diógenes; nº 83. T.O.: She (1887). También traducida como Ella. Historia de aventuras y La diosa de fuego.
Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)
CALIFICACIÓN: ***
- bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra
[1] Este es el título con el que fue distribuida en Estados Unidos. En algunas filmografía figura como otra película.