Ricky, John, Edward y Sears son cuatro ancianos, amigos desde hace una eternidad. Suelen reunirse en un club para narrarse mutuamente historias pavorosas, pero por las noches son asaltados por terribles pesadillas. La muerte del hijo de uno de ellos, tras una relación con una misteriosa mujer, parece desatar algo vinculado con el pasado de los cuatro hombres.

Dirección: John Irvin. Producción: Universal Pictures. Productor: Burt Weissbourd. Co-productor: Douglas Green. Productor asociado: Ronald G. Smith. Guion: Lawrence D. Cohen, según la novela de Peter Straub. Fotografía: Jack Cardiff. Música: Philippe Sarde. Montaje: Tom Rolf. Diseño de producción: Norman Newberry. FX: Rick Baker, Carl Fullerton (efectos de maquillaje), Dick Smith (ilusiones de maquillaje), Syd Dutton, Henry Schoessler (pinturas matte), Albert Whitlock (efectos visuales). Intérpretes: Fred Astaire (Ricky Hawthorne), Melvyn Douglas (John Jaffrey), Douglas Fairbanks Jr. (Edward Wanderley), John Houseman (Sears James), Craig Wasson (Don / David), Patricia Neal (Stella), Alice Krige (Alma / Eva), Jacqueline Brookes (Milly), Miguel Fernandes (Gregory Bate), Lance Holcomb (Fenny Bate), Mark Chamberlin (John Jaffrey de joven), Tim Choate (Ricky Hawthorne de joven), Kurt Johnson (Edward Wanderley de joven), Ken Olin (Sears James de joven), Brad Sullivan (sheriff Hardesty), Michael O’Neill (Churchill), Guy Boyd (Omar Norris), Robert Burr (director), Helena Carroll (Mrs. Meredith), Robin Curtis (Rea Dedham), Breon Gorman (Nettie Dedham), James Greene, Cagle D. Green, Kyra Carleton, Ruth Hunt, Deborah Offner, Virginia Bingham, William F. Conway, Russell R. Bletzer, Terrance Mario Carnes, Alfred Curven, Edward F. Dillon, Alvin W. Fretz, Hugh Hires, Raymond J. Quinn, Barbara von Zastrow, Betty Low, Mason Cardiff, Gale Grindle… Nacionalidad y año: Estados Unidos 1981. Duración y datos técnicos: 110 min. color 1.85:1.

Peter Straub (nacido en 1943) saltó a la fama con su novela Fantasmas (Ghost Story, 1979), si bien con anterioridad había escrito otras, alguna incluso ya llevada a la pantalla[1]. Si bien sus libros anteriores ―los dos primeros de carácter mainstream, y los dos siguientes ya de temática sobrenatural― tuvieron un cierto eco crítico, no fue hasta Fantasmas que logró el reconocimiento de los estudiosos, al tiempo que se convirtió en un superventas.

El libro lo leí en su día, y me pareció muy bueno, pero en la actualidad apenas recuerdo nada, salvo que las narraciones que los personajes se contaban entre sí eran varias, formando una especie de selección de relatos dentro de la historia general, y una de las narraciones, bastante extensa además, era una reescritura de Otra vuelta de tuerca (The Turn of the Screw, 1898), de Henry James, cambiando la institutriz por un maestro de escuela, aunque el resultado, en todo caso, era bastante bueno. Sobre la historia base en sí apenas recuerdo nada, y la presente película tampoco la recordaba demasiado, así pues, dado que el film fue acusado de variar demasiado el original del que procede, quizás sea interesante analizarlo exclusivamente por sus valores cinematográficos.

El mismo año de la publicación de la novela, Universal compró los derechos por 225.000 dólares. Como director se optó por el británico John Irvin, que con anterioridad había rodado el film bélico Los perros de la guerra (The Dogs of War, 1980), pero que llamó la atención del productor Burt Weissbourd por un telefilm previo, Haunted: The Ferryman (1974), basado en una novela de Kingsley Amis, y protagonizado por Jeremy Brett como un escritor de historias de horror que, en una casa de vacaciones, ve cómo las amenazas de sus obras se tornan realidad. Como guionista, por lo demás, se optó por Lawrence D. Cohen ―no confundir con Larry Cohen, como se ha hecho muchas veces―, que con anterioridad había adaptado en 1976 la novela de Stephen King Carrie para Brian De Palma.

Sea como fuere, se percibe que la trama está notablemente constreñida, en especial durante la primera media hora, donde todo aparece de carácter casi telegráfico, lo que va en perjuicio para que el espectador se introduzca en la muy grata atmósfera que el director pretende recrear, y con lo cual se tarda en entrar en la historia. En ella se nos presenta a cuatro ancianos asaltados por terribles pesadillas, y pronto sospechamos que una sombra del pasado les tiene obsesionados. El hijo de uno de ellos (interpretado por Craig Wasson con bigote) muere, y el hombre llama a su otro hijo (también Craig Wasson, pero sin bigote) para que asista al entierro. Pese a que la importancia del relato recae sobre esos cuatro hombres veteranos, el protagonismo narrativo salta a Don, ese segundo hijo, que ya vivió una relación con la misteriosa mujer a la cual está vinculada la muerte de su hermano David, y que al poco de llegar de regreso a la población de Milburn empieza a sospechar que algo inquietante sucede.

Milburn, en el estado de Nueva York, es una población ficticia[2], e Irving la recrea en época invernal, confiriéndole un aspecto hogareño y entrañable, con hermosos bosques nevados, casi como en un cuento navideño. Esa ambiente es violentado por el del campus ―asaltado por constantes tormentas― donde se nos narra la historia de Don con Alma, esa misteriosa mujer que entró en su vida, y más tarde con la del propio Milburn, cincuenta años atrás, y en época veraniega. Ambos sucesos, por supuesto, tienen relación con lo que en la actualidad acontece, e Irving se toma su tiempo ―pese a esa velocidad abrupta del inicio, como se dijo― para ir presentando las situaciones y, sobre todo, para implicarnos con los personajes, cuatro pobres ancianos torturados por un espectro terrible. Y es que la intención, por supuesto, es que nos sintamos afligidos por esos hombres torturados por un mal espantoso. Después, cuando ya nos hemos encariñado de ellos, se nos desvelará la aterradora verdad.

Gran parte de la fuerza de la película estriba en las excelentes interpretaciones que ofrecen cuatro actores veteranos como son Fred Astaire, Melvyn Douglas, Douglas Fairbanks Jr. y John Houseman, quienes crean unos personajes entrañables a los cuales otorgan de una variedad de atractivos perfiles. A su lado tenemos a Craig Wasson, un actor que por aquellos años intentó ser lanzado como una estrella, pero que no logró el éxito que su talento merecía; y la maravillosa Alice Krige, quien podría considerarse que ha sufrido igual mala suerte que su compañero, si bien paralelamente se ha convertido en un icono del género fantástico, por su participación en diversas películas y series de la temática, resaltando su cometido como reina borg en la franquicia Star Trek.

Para ser sinceros, los momentos de terror son escasos, y puede que ello sea producto del feroz resumen que se le ha otorgado a la historia[3], aunque esos instantes resultan impactantes, y vienen apoyados además de unos diseños creados por el gran Dick Smith. La estructura de la historia hace pensar en que la película parece una adaptación de alguna ignota novela de… Stephen King. Algo, por otro lado, nada sorprendente. El autor de Maine cita Fantasmas en su ensayo Danse Macabre, calificándola como «una de las más exquisitas novelas de terror de finales del siglo XX». Después, ambos escritores desarrollaron una amistad, y escribieron juntos las novelas El talismán (The Talisman, 1984) y su secuela Casa Negra (Black House, 2001). Siendo más estrictos, igualmente recuerda un tanto a It – Eso (It, 1986), en lo que respecta a la ambientación en un pueblo, y con un grupo de personajes que sufren en dos épocas distintas el acoso de un Mal.

Historia macabra (Ghost Story, 1981) resulta irregular, sin duda por esa narración algo espasmódica y por intentar, de alguna manera, ser algo más que una mera película de terror, pero tiene elegancia, fuerza narrativa, personajes interesantes servidos por actores portentosos, una excelente fotografía obra de Jack Cardiff y una preocupación por desarrollar algo que vaya más allá que a una mera acumulación de sustos sin fondo narrativo que, vista hoy día, se agradece y valora. Quizás mucho más de lo que se hizo en el momento de su aparición.

 

Anécdotas

 

  • Títulos en Argentina: Cuento de fantasmas / Historias de fantasmas (en televisión). Título en México: Cuento de fantasmas.
  • En 1981, en los premios The Stinkers Bad Movie fue nominada a los efectos especiales menos especiales. En 1982, la Academy of Science Fiction, Fantasy & Horror Films la nominó a un premio Saturn en la categoría de mejor película de terror.
  • Última película para Melvyn Douglas, Fred Astaire y Douglas Fairbanks Jr.
  • El órgano que aparece es el mismo que se usó en El fantasma de la ópera de Lon Chaney.
  • El presupuesto estimado de la película fue de 13,5 millones de dólares.
  • Estrenada en Estados Unidos el 18 de diciembre de 1981, tras un premier el día 15. En España se estrenó el 1 de mayo de 1982.

 

Bibliografía

Fantasmas; por Peter Straub; traducción de Lucrecia Moreno de Sáenz. Barcelona: Plaza & Janés, 1989. Colección: Éxitos; s/n. T.O.: Ghost Story (1979).

 

Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)

 

CALIFICACIÓN: ***

  • bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra

 

[1] El círculo de la muerte (Full Circle, Richard Loncraine, 1977), basada en la novela Cuando el círculo se cierra / La obsesión de Julia (Julia, 1975).

[2] La ciudad reapareció brevemente en otra novela de Straub, Koko (Koko, 1988).

[3] Leyendo documentación descubro, por ejemplo, que el mendigo loco y el niño que lo acompaña, y que en el film aparecen de pasada en tres ocasiones, son los personajes con los que arranca la novela. Además, tengo dudas si el acompañante del mendigo en la película es niño o niña.