Unos buscadores de tesoros están faenando cerca de la costa irlandesa cuando de pronto un volcán submarino reflota y provoca una erupción con un consiguiente tsunami. Arriban al puerto de una isla, para arreglar el barco, pero son recibidos con hostilidad. De pronto, del mar brota un monstruo prehistórico.

Dirección: Eugène Lourié. Producción: King Brothers Productions. Productores: Wilfred Eades, Herman King. Co-productores: . Productores delegados: Frank King, Maurice King. Productor asociado: James Leicester. Guion: Robert L. Richards, Daniel James, según argumento de Eugène Lourié y Daniel Hyatt. Fotografía: Freddie Young [acreditado como F. A. Young]. Música: Angelo Francesco Lavagnino. Montaje: Eric Boyd-Perkins. Dirección artística: Elliot Scott. FX: Tom Howard (efectos visuales). Intérpretes: Bill Travers (Joe Ryan), William Sylvester (Sam Slade), Vincent Winter (Sean), Christopher Rhodes (McCartin), Joseph O’Conor (profesor Hendricks), Bruce Seton (profesor Flaherty), Martin Benson (Dorkin), Maurice Kaufmann (reportero radiofónico), Basil Dignam (almirante), Barry Keegan, Tommy Duggan, Howard Lang, Dervis Ward, Ed Bishop, Fred Davis, Mick Dillon, Nigel Green, Harvey Hall, John More, Stanley Morgan, Alex Scott, John H. Watson, Dave Wilding, John Wood… Nacionalidad y año: Reino Unido 1961. Duración y datos técnicos: 76 min. color 1.85:1.

 

A cualquier espectador familiarizado con el cine de monstruos le resultará evidente que la película británica Gorgo (Gorgo, 1961) busca aprovecharse comercialmente del éxito de previas cintas niponas de la temática. Japón bajo el terror del monstruo (Gojira, Ishirô Honda, 1954) representó el botón de arranque para este tipo de cine, que destacó por el uso de la denominada técnica de suitmation, consistente en que las criaturas, en vez de estar confeccionadas por medio de la stop-motion o marionetas, eran personas disfrazadas dentro de un traje y desfilando por maquetas que jugaran con las proporciones. En Gorgo se emplea esta misma técnica, y la estructura de la historia podría asemejarse a alguna de las muchas aventuras de Godzilla y su parentela. De un modo sorprendente, la copia sería copiada: la japonesa El monstruo que amenaza al mundo (Daikyojû Gappa, Hiroshi Noguchi, 1967) repetiría el esquema argumental de la presente.

De todas maneras, no puede decirse que esta empresa fuera debida a elementos ajenos que buscaran un crédito fácil. Su director, el francés de origen ruso Eugène Lourié, ya tenía experiencia en el medio. Lourié se inició en el campo de la dirección artística, donde posee más prestigio: debutó en ese cometido con Médico improvisado (Un coup de téléphone, Georges Lacombe, 1932), y en su posterior carrera compuesta por treinta y ocho títulos trabajó con realizadores del nivel de Jean Renoir, Max Ophüls, René Clair, Sam Fuller, Charles Chaplin o Robert Siodmak, y su última película fue Bronco Billy (Bronco Billy, Clint Eastwood, 1980). Como director solo rodó cuatro películas, todas las cuales se basaban en el uso importante de los efectos especiales, que él coordinaba perfectamente con los decorados. Esas cintas fueron El monstruo de tiempos remotos (The Beast from 20,000 Fathoms, 1953), con efectos por stop-motion de Ray Harryhausen, The Colossus of New York [dvd: El coloso de Nueva York, 1958], al margen de esta corriente, Behemoth the Sea Monster [dvd: El monstruo submarino, 1959], con trucajes encabezados por Willis H. O’Brien, y la presente.

La producción del film corresponde a los hermanos King, nacidos como Kozinsky, e integrados por Frank, Maurice y Herman. Durante la época del maccartysmo contrataron a bastantes guionistas represaliados, y entre su filmografía figura una joya como El demonio de las armas (Gun Crazy, Joseph H. Lewis, 1950), así como la prestigiosa El Bravo (The Brave One, Irving Rapper, 1956). En esa etapa tocaron cierta variedad de géneros, aunque insistiendo en el negro, pero en los sesenta buscaron un tipo de cine más comercial. Ese período se iniciaría con la presente, y proseguiría con Las aventuras de Simbad (Captain Sindbad, Byron Haskin, 1963), que buscaba imitar las cintas sobre el marino producidas por Ray Harryhausen, pero con efectos especiales notablemente inferiores, y que no se sustentaban en la técnica de stop-motion. Después seguirían en el cine de aventuras, pero sin elementos fantásticos.

Los King, aparte de productores, eran distribuidores, y en tal modalidad se encargaron de programar en los cines norteamericanos la japonesa Daikaijû Baran (1958) como Varan the Unbelievable. En vista del éxito conseguido, se plantearon hacer una película de similar onda, y de ahí nació la presente idea. En un inicio, la idea era ambientarla en Japón y coproducir con ese país. En esa fase del proyecto los protagonistas eran buscadores de perlas, en lugar de cazadores de tesoros. Los planes de coproducción no llegaron a buen puerto, y después se harían diversos cambios: tras Japón, fueron considerados lugares de acción París, Irlanda y, finalmente, Inglaterra. En un momento determinado también optaron por utilizar Australia como localización; sin embargo, se pensó que a nadie le importaría que un monstruo atacara ese país y, por tanto, se decidieron por Inglaterra.

 

Se ha referido con anterioridad el parecido, en su estructura dramática, con el cine previo de Godzilla. Siendo así, conviene matizar que también incorpora bastantes elementos de un clásico como King Kong (King Kong, Merian C. Cooper, Ernest B. Schoedsack, 1933): el descubrimiento de la criatura en una isla, su traslado a la ciudad para exhibirlo, la irritación del monstruo por los flashes de los fotógrafos, su huida y posterior destrucción de la urbe. En todo caso, se agregan de igual modo determinados factores mitológicos que enriquecen la creación de Gorgo: el arqueólogo del inicio posee gran cantidad de reliquias vikingas; el niño, ante la aparición de la bestia, la llamará Orga, un espíritu marino. Y, finalmente, cuando vaya a presentarse en Londres, el dueño del circo, Dorkin, decide llamarlo Gorgo «en alusión a la Gorgona, cuya sola visión paralizaba a la gente»[1].

Estropea en parte la película la inclusión de muchas escenas de archivo consistentes en tomas de militares y aviones. Para ello, los King compraron las imágenes en el Reino Unido y en Estados Unidos. Inclusive hay algún plano, de esas características, proveniente de Varan the Unbelievable, aprovechando que tenían los derechos. Otra cosa que fue muy criticada fue la ausencia de mujeres en papeles de relieve: solo alrededor del minuto treinta y cinco de la película aparecen las dos únicas actrices con diálogo hablado, y todas las demás mujeres que se ven en el film son extras que no tienen diálogo, y que solo corren huyendo de la ira de la bestia. Ello daría a pensar que no hay historia de amor en el film, aunque no sería del todo exacto: la relación que hay entre los dos protagonistas, Joe Ryan y Sam Slade, parece la de una pareja, e inclusive incorporan a la familia a un hijo, representado por Sean, el chaval que se les une.

 

El plato fuerte de la película, por descontado, son las escenas finales de Gorgo y luego su madre destruyendo Londres. Los trajes de las criaturas (muy similares, diríase indistinguibles) están mucho mejor trabajados que sus colegas japoneses, aunque el movimiento de las orejas delata que se trata de goma. Pero su magnificencia es arrolladora, lo cual se consigue rodando a distinta velocidad de la habitual, lo cual otorga «pesadez» a la masa de las criaturas. Las maquetas de Londres son también excelentes, y la solidez de la piedra cuando se derrumba está muy conseguida. Todo ello, agrandado por la hermosa fotografía debida a Freddie Young, que aparece acreditado como F. A. Young, quién sabe por qué. Los planos del monstruo vagando envuelto en una bruma rojiza son extraordinarios.

Se trata de una cinta sencilla, una mera monster movie destinada a entretener. En ese sentido, cumple sus objetivos, está bien realizada y a nivel técnico cumple con creces. Tiene un buen reparto, compuesto por figuras discretas de la escena británica: Bill Travers sería más conocido por su participación en la bonita Nacida libre (Born Free, James Hill, Tom McGowan, 1966); a William Sylvester lo podemos recordar por la terrorífica Devil Doll [tv: El muñeco diabólico, Lindsay Shonteff, 1964] y la fundamental 2001: Una odisea del espacio (2001: A Space Odyssey, Stanley Kubrick, 1968); e incluso el niño, Vincent Winter, está bastante bien y no resulta cargante; haría nueve películas en total, y después desarrolló una carrera como ayudante de dirección.

 

Anecdotario

  • El actor Mick Dillon   es el que está enfundado dentro del disfraz de Gorgo. Su carrera es muy escasa, y ha realizado otros papeles en esa onda, como el de un dalek en la serie de Doctor Who o un trífido en La semilla del espacio. En otros momentos, quien lo porta es Dave Wilding; ambos coincidieron haciendo roles de jockeys en James Bond contra Goldfinger. Otros dos actores se metieron también en los tres trajes construidos al efecto.
  • Los exteriores iniciales en la isla se filmaron en Coliemore Harbour, Dublín, en Irlanda. El lugar donde aparece Gorgo por primera vez, la ficticia isla de Nara, es un anagrama de las islas de Arán, frente a la costa occidental de Irlanda. Nara también es el nombre es una de las épocas en el período de desarrollo de Japón.
  • El rodaje de la película tuvo lugar durante septiembre de 1959. (Eso se puede descubrir porque en un plano donde recorren Picadilly Circus con Gorgo en un camión se ve la cartelera del film de la Hammer La momia, que se estrenó ese año. En otro momento se ve el póster de Estoy bien, Jack, otra película de ese año).
  • Gene Simmons, del grupo de rock Kiss, fan declarado de las películas de monstruos, basó el diseño de sus botas de actuación en la cabeza de Gorgo.
  • El guion original de la película no contenía ninguna acción militar. Eugène Lourié argumentó que el fuego de las armas mataría a un monstruo, por muy grande que fuera, pero los hermanos King querían enfrentamiento bélico.

  • Eugène Lourié adquirió una copia de 35 mm de la película para su visionado privado y recortó personalmente todas las secuencias de acción militar que aparecían en ella.
  • Debido a las reescrituras y a los nuevos rodajes resultantes, esta película se convirtió en la más cara jamás realizada por sus patrocinadores británicos, los hermanos King: su coste final fue de 650.000 dólares, aproximadamente lo que había costado King Kong (1933) casi 30 años antes.
  • Las escenas en las que Gorgo es transportado por las calles de Londres se rodaron un domingo por la mañana para que el equipo de filmación no se viera molestado por el tráfico.
  • El clímax de la película se inspiró en una reacción de la hija de Eugène Lourié, que lloró al final del film. Behemoth, the Sea Monster (1959), cuando mataron al monstruo que aparecía en ella (su padre también era el director). Cuando esto ocurrió, decidió dejar vivos a los dos monstruos de esta cinta.
  • La novelización de la película, publicada por Monarch Books, fue escrita por Carson Bingham (seudónimo de Bruce Cassiday), quien por su cuenta añadió un montón de escenas de carácter sexual. Él también hizo novelizaciones de Konga (1961) y Reptilicus (1961), que igualmente destacan por esas peculiaridades.
  • De 1961 a 1965, Charlton Comics publicó una adaptación en cómic de la película de un un único ejemplar, seguida de una serie de cómics de 22 números y una miniserie de cómics de tres entregas (en la que el número 1 se titulaba Gorgo’s Revenge y los números 2 y 3 se titulaban The Return of Gorgo). En la primera etapa colaboró el gran Steve Ditko, así como Dick Giordano. Tanto Charlton Comics como Monarch Books pertenecían al grupo editorial Charlton Publications.
  • La película japonesa estrenada en España con el título de Gorgo y Superman se citan en Tokio (Gojira tai Megaro, Jun Fukuda, 1973) nada tiene que ver con la presente. Fue una idea de los listos distribuidores españoles (Cire Films, S.L.), que intentaron aludir ambos mitos como aprovechamiento comercial. En lugar de Gorgo se trata de Godzilla, y en lugar de Superman, Jet Jaguar. Y en ningún momento ninguno de los dos dice: «Oye, ¿quedamos en Tokio y nos tomamos unas birras?». Después, la película se ha editado en vídeo y DVD como Godzilla contra Megalon. [Por su parte, en Italia, la película japonesa El hijo de Godzilla fue retitulada Il ritorno di Gorgo («El regreso de Gorgo») a finales de la década de 1970.
  • En 1969, se oyeron rumores de una película estadounidense titulada Gorgo vs. Godzilla, pero luego nunca más se supo.
  • Estrenada en el Reino Unido el 27 de octubre de 1961 en una premier londinense, y después en el resto del país el 37 de noviembre. En todo caso, con anterioridad se había proyectado en otros países, como Japón, Estados Unidos, Alemania, México… En España se estrenó el 18 de diciembre de 1972, en Madrid, directamente en cines de barrio, en concreto en el Candilejas, Coimbra, Concepción, Copacabana, Falla, Magallanes y Marvi, en programa doble con otras películas.

 

Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)

 

CALIFICACIÓN: ***

  • bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra

 

[1] De ahí que la publicidad original evitara mostrar imágenes de la criatura.