Adam es un guionista de televisión que habita en un edificio casi vacío; solo vive en él otro vecino, con quien, tras diversos encuentros, inicia una relación romántica. A veces, toma el tren y se traslada al pueblo de su infancia para visitar a sus padres, quienes murieron en un accidente cuando él tenía diez años.

Dirección: Andrew Haigh. Producción: Blueprint Pictures, Film4, Searchlight Pictures, TSG Entertainment. Productores: Graham Broadbent, Peter Czernin, Sarah Harvey. Co-productor: Jeremy Campbell. Productores delegados: Daniel Battsek, Farhana Bhula, Ben Knight, Ollie Madden, Diarmuid McKeown. Guion: Andrew Haigh, según la novela de Taichi Yamada. Fotografía: Jamie Ramsay. Música: Emilie Levienaise-Farrouch. Montaje: Jonathan Alberts. Diseño de producción: Sarah Finlay. FX: Scott MacIntyre (supervisor de efectos especiales), Eric Jacobo (coordinador de efectos visuales), Union Visual Effects (efectos visuales). Intérpretes: Andrew Scott (Adam), Paul Mescal (Harry), Jamie Bell (padre de Adam), Claire Foy (madre de Adam), Ami Tredrea (camarera), Carter John Grout (Adam de niño), Cameron Ashplant, Lincoln R. Beckett, Jack Cronin, Christian Di Sciullo, Oliver Franks, Hussein Kutsi, Gsus Lopez, Jack Pallister, Guy Robbins, Darren Ryames, Zachary Timmis, Sean Tizzard, Carolina Van Wyhe… Nacionalidad y año: Reino Unido 2023. Duración y datos técnicos: 105 min. – color – 2.39:1 – D-Cinema.

 

Debo reconocer que no conocía para nada al director británico Andrew Haigh[1]. Fue responsable de tres cortometrajes, Oil (2003), Markings (2005) y Cahuenga Blvd (2005), también escritos por él. Su debut en el largo se produjo con Greek Pete (2009), sobre un chico de alquiler, seguido de Weekend (Weekend, 2011), de temática gay, y 45 años (45 Years, 2015), que trata sobre una larga relación de una pareja interpretada por los estupendos Charlotte Rampling y Tom Courtenay; con guion propio de igual modo, esta vez adaptaba un relato del escritor David Constantine. A continuación se puso al frente de la serie de televisión Looking (Looking, 2014-2015), centrada en un grupo de homosexuales, de la que es asimismo co-creador, y para la cual dirigió diez episodios así como un telefilm homónimo en 2016. De nuevo pasó a la pantalla grande con Apóyate en mí (Lean on Pete, 2017), sobre la amistad entre un adolescente y un caballo, y basada en una novela de Willy Vlautin. Su carrera como realizador se completa con una breve participación en otras dos series televisivas, The OA (The OA, 2016-2019), para la cual dirigió dos episodios en 2019, y La sangre helada (The North Water, 2021), con cinco capítulos.

Como puede comprobarse, una constante en su carrera es la temática gay, así como, en general, las relaciones humanas; y también se detecta cierta predilección por la materia fantástica. En una encuesta en 2022 para la revista Sight & Sound citó como sus películas favoritas Narciso Negro (Black Narcissus, Michael Powell, Emeric Presburger, 1947), Con faldas y a lo loco (Some Like It Hot, Billy Wilder, 1959), La aventura (L’avventura, Michelangelo Antonioni, 1960), El mensajero del miedo (The Manchurian Candidate, John Frankenheimer, 1962), Gritos y susurros (Viskningar och rop, Ingmar Bergman, 1972), Amenaza en la sombra (Don’t Look Now, Nicolas Roeg, 1973), Orejas largas (Watership Down, Martin Rosen, John Hubley, 1978), Ratcatcher (Lynne Ramsay, 1999)[2], Lejano (Uzak, Nuri Bilge Ceylan, 2002)[3] y La niña santa / La piccola santa (Lucrecia Martel, 2004)[4]. Es gay y ateo, está casado con el escritor Andy Morwood y son padres de dos hijas.

Desconocidos (All of Us Strangers, 2023) está basada en una novela, Ijin-tachi to no natsu (1987), obra de Taichi Yamada (1934-2023), y ganadora del premio Yamamoto Shūgorō. Como no conozco el libro —inédito en España, para variar— no puedo plantear temas de fidelidad ni de aprovechamiento del potencial de este, y pasaré a comentar el film en sí. Lo que resalta de este, sobre todo, es su profunda melancolía. Adam es solitario, pero esa soledad está acrecentada por habitar en un enorme edificio donde solo habita un único vecino más. Este vecino, Harry, tontea con él en el ascensor, pero Adam prefiere no hacerle caso y regresa a su apartamento, donde intenta desarrollar un guion a partir de los recuerdos que tiene de sus padres. Estos murieron en un accidente de coche cuando él tenía diez años, pero en un momento dado él se traslada a la vieja casa familiar y allí se los encuentra.

El film es un drama lóbrego, donde Adam procura reencontrar ese afecto, ese amor que perdió de sus padres. Muertos estos, como se dijo, cuando él tenía diez años, pasó luego a vivir con su abuela. El tiempo que vivió con ellos, como es lógico, se le hizo corto, y ahora reinicia esa relación, pese a que él tiene más edad que sus padres, pues estos siguen congelados en el momento de su deceso. Es curioso cómo, en ocasiones, ellos le tratan como si aún fuese un niño pequeño, e incluso él se comporta como tal (véasele con el colorido pijama, que le está pequeño, yendo a dormir con ellos porque no puede conciliar el sueño).

Adam es gay, y eso es importante en la película. Por lo que he leído sobre el libro, no me ha quedado claro, pero ese vecino con el que inicia una relación también aparece en la novela, y Yamada, al menos, tiene otra obra, Toku no Koe wo Sagashite (2006), que plantea el tema. El hecho de que Andrew Haigh sea gay no significaría tanto que ha reconducido la trama hacia sus intereses, sino que la propia historia base le sirve para explorar los temas que le conciernen, estén explícitos o implícitos en su origen.

De tal manera, tanto Harry, el vecino que se convierte en su amante, como sus padres, sirven a Adam como interlocutores con los cuales sondear sus emociones, para formular que, de cara a los demás, todos nosotros somos desconocidos, incluso para nuestros más íntimos. Adam sufre de enormes carencias emocionales; dice que nunca ha estado enamorado. Con uno y con otros explorará sus sentimientos, y con sus padres recuperará, además, todo lo que no puedo disfrutar en el quiebro de su infancia. Desconocidos es un drama adulto e inteligente que analiza con perspicacia y un tono lóbrego esa búsqueda de impresiones por parte de los personajes.

Al principio surge la duda de si las «visitas» de Adam a sus padres se producen solo en la mente, si es un intento de reproducir en su subconsciente todo aquello que no pudo decirles, o si realmente, de alguna manera, ellos han vuelto… La forma en la cual Haigh plasma las apariciones es de una manera muy cotidiana, con ellos viviendo en su casa, reproduciendo los esquemas tradicionales de una existencia trivial. Cuando Adam va en su busca por vez primera, parece como si algo le impulsara, y la sorpresa inicial de ver a su padre se disipa casi de inmediato. Por algún extraño motivo, ellos están de nuevo ahí, y para él eso es suficiente.

Tanto sus padres como Adam son conscientes de lo que sucede, pero intentan eludir la idea. Solo hacia el final se plantean lo que está acaeciendo, y se nos descubre que los padres saben que están muertos. Incluso le preguntan tímidamente si sufrieron o no en el instante del fallecimiento… Ese fenómeno, sea como fuere, se hace palpable solo para Adam. Cuando en un momento determinado quiere presentarles a Harry, llama a la puerta una y otra vez, pero no parece haber nadie. Solo en un momento vislumbraremos sus figuras en la oscuridad, inmóviles, inaprensibles, como auténticos aparecidos, y Harry también podrá entreverlos entonces. Hacia el final hay un cambio de punto de vista muy atractivo que, además, nos hace cuestionarnos muchas cosas más (que no especificaré para posibles futuros espectadores).

Andrew Haigh narra el conjunto con una fotografía oscura, tenebrosa, con profusión de primeros planos donde los personajes expresan la intensidad de la mirada. Viendo su lista de favoritas arriba citada, el ambiente asfixiante podría recordar a Gritos y susurros, y el tono de otredad resultaría similar al de Amenaza en la sombra. Pero la referida lista no chirría viendo el estilo que despliega en la presente, y resulta muy consecuente.

Una película de este planteamiento, por lo demás, sería muy difícil de ejecutar sin actores y actrices que nos convencieran de su realidad. Por suerte, aquí solo tenemos cuatro intérpretes, y los demás son como comparsas neblinosos que les acompañan. Y esos cuatro intérpretes son por completo excepcionales, cumpliendo la convención mil veces referida de lo excelso de los actores británicos (o irlandeses). Los cuatro aportan un trabajo absolutamente anonadador, convirtiendo Desconocidos en un espectáculo interpretativo de primerísimo orden. Solo por eso ya merecería la pena, pero es que, además, lo que cuenta, y cómo lo hace, es sumamente interesante y cautivador.

 

Anecdotario

  • Título de rodaje: Strangers.
  • Título en Argentina y México: Todos somos extraños.
  • Premios: 2023: British Independent Film: premio a mejor film independiente británico, director, guion, interpretación secundaria (P. Mescal), fotografía, montaje, supervisión musical; y nominaciones a mejor protagonista (A. Scott), interpretación secundaria (J. Bell y C. Foy), casting (Kahleen Crawford), maquillaje y peluquería, diseño de producción, sonido. Festival de Cine de Valladolid: ganador de la Espiga Arcoíris a mejor película. 2024: BAFTA: nominaciones a mejor película británica, director, guion adaptado, actriz secundaria (C. Foy), actor secundario (P. Mescal) y casting. Globos de Oro: nominación a mejor interpretación masculina en film dramático (A. Scott). London Critics Circle Film: premio a mejor película británica/irlandesa del año, interpretación británica/irlandesa (P. Mescal), actor (A. Scott); y nominaciones a film del año, guion, actriz secundaria (C. Foy), actor secundario (P. Mescal), interpretación británica/irlandesa (A. Scott), casting. Etc., hasta un total de 22 premios y cien nominaciones, en el momento de escribir estas líneas.
  • Adaptación libre de la novela Ijin-tachi to no natsu (1987) de Taichi Yamada, libro que también inspiró la película homónima de Nobuhiko Ôbayashi en 1988. El título original significa «El verano de la gente extraña», y en el mundo anglosajón se publicó como Strangers. En España es inédita, salvo error.
  • La casa de la infancia de Andrew Haigh sirvió de lugar de rodaje para la casa en la que Adam encuentra a sus padres.

  • Jamie Bell llevaba lentillas marrones para parecerse más a los ojos de Andrew Scott.
  • Su premier se produjo en el 50º Festival de Cine de Telluride el 31 de agosto de 2023.
  • Estrenada en el Reino Unido el 26 de enero de 2024 y en España el 23 de febrero de 2024. 

Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)

 

CALIFICACIÓN: ****

  • bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra

 

[1] Antes de pasar a dirigir fue ayudante de montaje.

[2] Es un drama sobre un joven ingenuo que vaga por las sucias calles del Glasgow de 1973.

[3] Se trata de un film turco acerca de un fotógrafo que sufre una crisis tras el abandono de su mujer.

[4] Es una premiada coproducción entre Argentina, Italia, Países Bajos y España sobre una muchacha de dieciséis años que trata de salvar el alma a un médico de mediana edad.