La ciudad de Khandaq lleva años sometida por una organización crimninal, Intergang, que está expoliando sus recursos, sin que las naciones del mundo entero hagan nada al respecto (ni los superhéroes). Cuando Adrianna Tomaz, una arqueóloga, intenta recuperar de unas ruinas una corona milenaria, es atacada por guerrilleros al servicio de Intergang, y ella despierta a Teth-Adam, un héroe de las leyendas del lugar, que comenzará a atacar a los acólitos de la multinacional. Ante este hecho, la Sociedad de la Justicia llega para retenerlo.
Dirección: Jaume Collet-Serra. Producción: DC Entertainment, Flynn Picture Company, Motion Picture Foundation of Hungary, New Line Cinema, New Zealand Film Commission, Québec Production Services Tax Credit, Seven Bucks Productions, Warner Bros. Productores: Beau Flynn, Dany Garcia, Hiram Garcia, Dwayne Johnson. Co-productora: Jennifer Conroy. Productores delegados: Richard Brener, Toby Emmerich, Walter Hamada, Geoff Johns, Eric McLeod, Dave Neustadter, Chris Pan, Adam Schlagman, Scott Sheldon. Guion: Adam Sztykiel, Rory Haines, Sohrab Noshirvani, basado en los personajes creados por Bill Parker [i.e.: Otto Binder] y C. C. Beck. Fotografía: Lawrence Sher. Música: Lorne Balfe, Peter G. Adams. Montaje: John Lee, Michael L. Sale. Diseño de producción: Tom Meyer. FX: Big Flick Rentals (equipo de efectos visuales), Captured Dimensions (escaneo en 3d), Clear Angle Studios (servicios de escaneo), Day For Nite (visualización), Proof (servicios de visualización), Happy Mushroom (departamento de arte virtual), Lux Machina Consulting (servicios de producción virtual), Scroggins Aviation (maqueta del helicóptero), Digital Domain, Double Negative, Effetti Digitali Italiani, Legacy Effects, Lola Visual Effects, Scanline VFX, Weta Digital (efectos visuales). Intérpretes: Dwayne Johnson (Black Adam / Teth Adam), Aldis Hodge (Hawkman / Carter Hall), Pierce Brosnan (Dr. Fate / Kent Nelson), Noah Centineo (Atom Smasher / Al Rothstein), Sarah Shahi (Adrianna Tomaz), Quintessa Swindell (Cyclone / Maxine Hunkel), Marwan Kenzari (Ishmael / Sabbac / King Ahk-Ton), Bodhi Sabongui (Amon Tomaz), Mohammed Amer (Karim), James Cusati-Moyer (Samir), Jalon Christian (Hurut), Benjamin Patterson (Teth Adam canijo), Odelya Halevi (Shiruta), Uli Latukefu (The Champion), Jennifer Holland (Emilia Harcourt), Henry Winkler (tío Al / Atom), Chaim Jeraffi (Djau), Sharon Gee (Mrs. Farmer), Stephan Jones (comandante), A. Manuel ‘Manny’ Miranda (soldado en la mina), Djimon Hounsou (el mago Shazam), Viola Davis (Amanda Waller), Raj Kala, E. Lloyd Napier, Kiara Rashawn, Onye Eme-Akwar, Sanna Erica, Vince Canlas, Tonea Stewart, Meghna Nagarajan, Patrick Sabongui, Alex Parkinson, Joseph Gatt, Kamen Casey, Dennis Dawson, Mike Senior, Jermaine Rivers, Regina Ting Chen… Nacionalidad y año: Estados Unidos 2022. Duración y datos técnicos: 124 min. color 2.39:1 2D / 3D.
Jaume Collet-Serra nació en San Acisclo de Vallalta, Barcelona, el 23 de marzo de 1974, pero se afincó en Hollywood a los dieciocho años. Allí estudió cine en una escuela de Los Ángeles, la Columbia College Hollywood, donde se especializó en la categoría de montador. Tras graduarse comenzó a rodar videos musicales[1] y publicidad, y pronto llamó la atención de diversas productoras cinematográficas. Su primera película fue La casa de cera (House of Wax, 2005), que, dentro de sus convenciones genéricas, daba ya muestras de su habilidad con la cámara. Vino después una cinta sobre deporte, ¡Goool 2! Viviendo el sueño (Goal II: Living the Dream, 2007) y con La huérfana (Orphan, 2009) ratificó sus capacidades para crear atmósferas turbias (la reciente precuela no hace sino confirmar sus destrezas). A continuación llegó una serie de thrillers donde dosificaba muy bien la tensión y la acción, protagonizados por Liam Neeson: Sin identidad (Unknown, 2011), Non-Stop: Sin escalas (Non-Stop, 2014), Una noche para sobrevivir (Run All Night, 2015) y El pasajero (The Commuter, 2018). Antes de esta, con Infierno azul (The Shallows, 2016), a través de su trama sencilla, casi minimalista, consiguió un ejercicio de estilo tenso y vibrante con la mera historia de una mujer acosada por un tiburón. En Jungle Cruise (Jungle Cruise, 2021) fue contratado por la Disney para llevar a la pantalla un espectáculo de sus parques temáticos, y pese a su pericia narrativa no consiguió eliminar el carácter de fórmula comercial de todo ello. En esta coincidió con Dwayne Johnson, y el actor del cráneo terso vuelve a aparecer en Black Adam (Black Adam, 2022), adaptación de un personaje de la DC[2].
Black Adam, en realidad, fue creado para la editorial Fawcett, y apareció primero dentro del nº 1 del cómic The Marvel Family con fecha de diciembre de 1945, obra del guionista Otto Binder[3] y el dibujante C. C. Beck, y el personaje era uno de los enemigos del Capitán Marvel / Shazam. En 1972 la DC reabsorbió la editorial antigua, e integró a los personajes de la Fawcett dentro de la continuidad de su multiverso. Precisamente, el personaje conocido ahora como Shazam[4] ya tuvo su versión fílmica con Shazam! (Shazam!, 2019), dirigido por David F. Sandberg; estaba previsto que Black Adam apareciera en esa aventura, pero al final se optó por concederle su propia película. Dentro de las diversas series televisivas de animación del pasado apareció en varias ocasiones, y en las recientes aportaciones en dibujos animados ha tenido participación en DC Showcase: Superman/Shazam!: El regreso de Black Adam (Superman/Shazam!: The Return of Black Adam, 2010), de Joaquim Dos Santos, con voz de Arnold Vosloo, Lego DC: ¡Shazam!: magia y monstruos (Lego DC Shazam!: Magic and Monsters, 2020), de Matt Peters, con Imari Williams, y la reciente DC Liga de Supermascotas (DC League of Super-Pets, 2022), de Jared Stern y Sam J. Levine, donde, en la secuencia post-créditos, surge el personaje, ahora con la voz de Dwayne Johnson.
Fue en septiembre de 2014 cuando el actor fue oficialmente vinculado al personaje, pero entre la decisión de otorgarle su propia película, y luego retrasos debidos a la epidemia de COVID-19, al final no ha sido hasta este momento en el que, al fin, ha aparecido en la pantalla. Dados los resultados, más vale que se hubiera quedado durmiendo el sueño de los justos…
Si ya en Jungle Cruise Collet-Serra se dejaba someter para llevar a efecto un producto comercial, en esta ocasión el descensus averno se intensifica a tal nivel que cualquier aspecto de personalidad previa queda totalmente anulado. Aquí (como en tantas otras producciones superheroicas, provengan de DC o de Marvel) la autoría del realizador queda totalmente anulada, y da lo mismo que en los créditos aparezca el nombre de Jaume Collet-Serra o de Robert Mackimson, pongamos por caso. En un (sub)producto de las presentes características resulta difícil calibrar hasta qué punto la persona que aparece bajo el rótulo «Directed by» posee potestad de decisión en momento alguno: los abundantes planos de efectos especiales están dominados por el equipo que se encarga de tal misión, las copiosas escenas de acción corresponden a la cuadrilla de la segunda unidad, y las escasas situaciones con personajes relacionándose se muestran con tal desidia y planicie que lo podría rodar hasta un especialista en filmar bautizos y comuniones. Por encima de todo, están los productores, controlando y dominando para que las convenciones que ellos creen que dan dinero en las taquillas (y muy posiblemente tengan razón) luzcan de continuo.
A nivel visual, Black Adam (Black Adam, 2022) se hace mortecina y desangelada. Puede que esta sea la cinta de acción con más tomas a cámara lenta de la historia. Si este recurso, por lo general, exterioriza falta de imaginación y convencionalidad, aquí este detalle llega a un nivel superlativo. Añádase a ello la fotografía deslustrada del prólogo ambientado cinco mil años antes, tan formularia y repetitiva como es norma de tanto film hollywoodiense en los últimos años. Existe un arranque donde se plantea la estructura sobre la cual versará todo y, después, cuando el héroe de la película aparezca, tenemos una pelea interminable, sin más, sin apenas descanso, con idas y venidas constantes de los personajes, con secuestros, rescates, caídas, inmolaciones y muertes una tras otra. En medio, da la impresión de que todos los integrantes de la trama se sienten con la capacidad de hacer chistes malos, soltándolos con una insistencia agotadora.
Dentro de todo ello, existen dos elementos de trasfondo que destacan, uno positivo, el otro no tanto. El reino (o ciudad, que no queda muy claro) de Khandaq[5] está controlado desde hace muchos años por una organización criminal, Intergang, que está expoliando sus recursos naturales y esclavizando a la población; en medio de todo ello, los países del primer mundo miran hacia otro lado y dejan que el saqueo se mantenga, sin preocuparse lo más mínimo por los derechos humanos. Es algo que, lamentablemente, sucede de forma muy habitual en nuestro mundo real, y solo hay una reacción en contra de casos así cuando puede deparar un beneficio económico para las grandes naciones. Ello se plantea en el film y se agradece ese toque de atención (que de nada sirve, por supuesto).
El otro elemento invalida el previo. En un momento determinado, Adrianna Tomaz (una especie de Lara Croft de tercera, que ya es decir) echa en cara a Atom Smasher (olvidemos el atroz nombre traducido al español que le han puesto) que solo distingue el mundo en blancos y negros, en buenos y malos. Pero es que ese es el espíritu de la temática de los superhéroes, al plantear un entorno totalmente desconectado de lo que es real y exponer unos personajes con poderes que pueden cambiar todo de un plumazo. Si jugamos a vincular este tipo de historias con la realidad, ha de hacerse con todo lo que conlleve. En ese caso, la heroína Adrianna se muestra como una hipócrita, que desea que los problemas de su país se solventen por la vía rápida, de la fuerza bruta, sin mancharse las manos, sino que sean otros (Black Adam) los que realicen el trabajo sucio. Si al final toma parte de alguna manera es para enfrentarse cara a cara con una especie de zombis que surgen de debajo de la tierra, y ya no hay más opción. De ahí a plantear un panfleto reaccionario solo existe un breve paso, pero no creo que sus guionistas pretendan eso. ¿Verdad?
Junto a ello tenemos una serie de personajes de escaso carisma y relieve, cuando no desagradables directamente, servidos además por unos actores muy anodinos. Quien se salva de ello es Pierce Brosnan y su doctor Fate, el único que se toma en serio su cometido y confiere dignidad a su rol. Junto a ello, acción sin freno, efectos especiales que en ocasiones son patentes en demasía, una trama exigua y mucha, mucha mediocridad.
Anecdotario
- A Jordan Peele se le ofreció originalmente la oportunidad de dirigir la película cuando se anunció por primera vez en 2017, pero Peele declinó.
- Dwayne Johnson preguntó una vez a sus fans qué personaje debía interpretar, el superhéroe Shazam o el supervillano Black Adam. Sus fans eligieron a Black Adam.
- Pierce Brosnan usa un traje de captura de movimiento para su papel de Doctor Fate.
- Originalmente, Black Adam iba a aparecer en ¡Shazam! (2019), pero luego se anunció que en su lugar debutaría en su propia película. También había planes para que Black Adam apareciera en El escuadrón suicida (2021), pero se desecharon cuando James Gunn se hizo cargo de esa película.
- La organización Intergang fue creada por Jack Kirby para su cómic Los Nuevos Dioses (New Gods), que junto a The Forever People y Mr. Miracle formaban El Cuarto Mundo (Fourth World) de Jack Kirby y por eso aparece acreditado en títulos de crédito finales.
- Adrianna Tomaz, al igual que Amon Tomaz, existen en los tebeos del universo DC. Dentro de este, ella es Isis, esposa de Black Adam, y su hermano —no hijo, como en la cinta—, es Osiris, formando la Black Adam Family —lgo que podría ocurrir en la secuela de la película—. El nombre es un derivado de Andrea Thomas, personaje de la serie televisiva en imagen real Isis / The Secrets of Isis, donde esta era la heroína Isis. Aunque el personaje interactuó con el Capitán Marvel, tanto en la serie de imagen real como en la animada, y tuvo una adaptación a los cómics publicada por DC, los derechos no pertenecen a la editorial sino a la productora televisiva, Filmation. Así, DC cambió el personaje para hacer su propia versión.
- Henry Winkler interpreta a el tío Al, sin duda Al Pratt, el primer Atom, que en los tebeos es su padrino.
- Originalmente, el villano de la Liga de la Justicia Eclipso iba a estar en la película, con un arte conceptual que mostraba el diamante del Corazón de las Tinieblas que contenía a Eclipso y que implicaba haber corrompido a Teth-Adam. Se eliminó para mantener a Adam como antihéroe en lugar de villano.
- La cuarta aparición en imagen real de la Justice Society of America después de las series Smallville (2001), DC’s Legends of Tomorrow (2016) y Stargirl (2020).
- Hawkgirl y Stargirl iban a aparecer originalmente, pero fueron eliminadas en favor de Cyclone. Eiza González fue considerada para el papel de Hawkgirl antes de que el personaje fuera eliminado del guion.
- El traje de Cyclone es una combinación de su traje verde normal en DC Comics y su traje de cinta púrpura del cómic Kingdom Come.
- Isabela Merced, Leslie Grace, Thomasin McKenzie, Kathryn Newton, Haley Lu Richardson, Mackenzie Foy, Alexandra Shipp y Odessa Young fueron consideradas para el papel de Cyclone.
- Dacre Montgomery, Eli Goree, Jacob Elordi y Matthew Noszka eran las principales opciones para Atom Smasher.
- Liam Neeson, que ya había trabajado con el director Jaume Collet-Serra en cuatro películas ―Sin identidad (2011), Non-Stop: Sin escalas (2014), Una noche para sobrevivir (2015) y El pasajero (2018)―, fue considerado para el papel de Kent Nelson/Doctor Fate.
- Armie Hammer y Alexander Skarsgård fueron considerados para el papel de Hawkman.
- Undécima película del Universo Extendido DC. La previa fue The Suicide Squad (2021), de James Gunn, y la siguiente será, en principio, Shazam! Fury of the Gods (2023), de David F. Sandberg, seguida tres meses después de la problemática The Flash (2023), de Andy Muschietti[.
- Esta película se inspira en gran medida en el cómic Justice Society of America de Geoff Johns, donde Adam es un antihéroe que se une y sirve en la Sociedad de la Justicia.
- La película recibió originalmente una calificación R debido a varias escenas de muertes, la mayoría de las cuales tuvieron que ser cortadas antes de que el film pudiera recibir la calificación PG-13, más viable desde el punto de vista comercial.
- Hay una escena más a mitad de los créditos finales (bastante importante).
- Estrenada en Estados Unidos y en España el 21 de octubre de 2022.
Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)
CALIFICACIÓN: •
- bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra
[1] Uno de ellos es Enrique Iglesias: Esperanza (1998), para ese artista de voz apabullante.
[2] El siguiente proyecto de Collet-Serra, que ya se está rodando, es Carry-On (2023), que se verá en Netflix, un nuevo thriller de acción, ahora protagonizado por Taron Egerton, sobre un viajero misterioso que chantajea a un miembro de la Agencia de Seguridad en Transportes norteamericana para hacer pasar un misterioso paquete el día de Navidad. Además, desde 2019 tiene un proyecto de remake de Evasión o victoria, el film de fútbol y nazis de John Huston.
[3] En los créditos de la película aparece consignado en su lugar Bill Parker, que fue el creador del Capitán Marvel, pero no de Black Adam.
[4] Debido a los conflictos de marca sobre otros personajes llamados «Capitán Marvel», propiedad de Marvel Comics, DC ha comercializado el personaje utilizando la marca Shazam! desde su reintroducción en 1972, lo que llevó a muchos a asumir que «Shazam!» era el nombre del personaje. DC renombró la versión principal del personaje como Shazam cuando relanzó sus propiedades de cómics en 2011, y sus asociados se convirtieron en la «Familia Shazam» también en ese momento. Información procedente de la Wikipedia inglesa.
[5] Dudo que se trate de la ciudad de igual nombre sita en Irán, puesto que en este tipo de fantasías no se suele recurrir a poblaciones reales en casos como el presente.