Las apacibles vidas de Mandy y Red, una pareja que vive en una casa de campo en medio del bosque, se ven bruscamente truncadas cuando un grupo de fanáticos religiosos irrumpe en sus vidas secuestrando a Mandy con oscuros fines. Mientras tanto, en el bosque, una banda de motoristas que parecen salidos del infierno siembra el caos y la destrucción a su paso.
Dirección: Panos Cosmatos. Producción: SpectreVision, Umedia, Legion M, Piccadilly Pictures, Wallimage, XYZ Films. Productores: Nate Bolotin, Martin Metz, Daniel Noah, Adrian Politowski, Josh C. Waller, Elijah Wood. Co-productor: Peter Bevan. Productores ejecutivos: Todd Brown, Maxime Cottray, Christopher Figg, Nadia Khamlichi, Nick Spicer, Lisa Whalen, Robert Whitehouse. Productor asociado: Brett W. Bachman. Guion: Panos Cosmatos, Aaron Stewart-Ahn, según argumento de P. Cosmatos; Chris ‘Casper’ Kelly (anuncio del duende del queso). Fotografía: Benjamin Loeb. Música: Jóhann Jóhannsson. Montaje: Brett W. Bachman; Paul Painter [anuncio del duende del queso]. Diseño de producción: Hubert Pouille. FX: Oriane De Neve (supervisora de efectos de maquillaje), Silver Scream FX Lab (anuncio del duende del queso), Master Control Entertainment Group (alucinación del oso), Umedia VFX (efectos visuales). Intérpretes: Nicolas Cage (Red Miller), Andrea Riseborough (Mandy Bloom), Linus Roache (Jeremiah Sand), Ned Dennehy (hermano Swan), Olwen Fouéré (madre Marlene), Richard Brake (el químico), Bill Duke (Caruthers), Line Pillet (hermana Lucy), Clément Baronnet (hermano Klopek), Alexis Julemont (hermano Hanker), Stephan Fraser (hermano Lewis), Ivailo Dimitrov (Skratch), Hayley Saywell (Sis), Kalin Kerin (Scabs), Tamás Hagyuó (Fuck Pig), Madd’yz Dog Lollyta (el perro Dog), Corfu (Lizzie the Tiger), Paul Painter (locutor / duende del queso [voz])… Nacionalidad y año: Estados Unidos, Bélgica, Reino Unido 2018. Duración y datos técnicos: 121 min. Color 2.35:1.
Mandy (Mandy, Panos Cosmatos, 2018) es una película que amas u odias, sin término medio. Y es que el cine de Panos Cosmatos es muy personal, nada convencional, destinado a raritos e inadaptados y de impronta propia. El hijo de George P. Cosmatos dará mucho que hablar en el futuro. Ya me encantó su ópera prima Beyond the Black Rainbow (2010) y han tenido que pasar ocho años para que gestara esta genialidad titulada Mandy. Soy muy consciente de que este cine no es para todo el mundo, solo algunos serán capaces de captar y percibir el fondo de lo que ve; o tal vez no haya dobles lecturas y todo sea simplemente lo que parece. Cada cual que evalúe lo que pueda descifrar.
Recomiendo ver la película en pantalla grande, dada esa fotografía y esos colores que por momentos beben de Argento y otras veces de David Lynch, Stanley Kubrick o John Carpenter. Mandy transcurre en la década de los ochenta y nos cuenta la historia de dos personas conectadas física y espiritualmente. Por un lado tenemos a la protagonista, Mandy (Andrea Riseborough), cuyo planeta es Júpiter, y por otro lado tenemos a su pareja, Red (Nicolas Cage) cuyo planeta es Saturno. Ambos viven en una casa de campo en mitad del bosque. La mirada de Mandy es un enigma, le gusta el heavy metal —tal como se aprecia por sus camisetas de Mötley Crüe y Black Sabbath—, y además lee libros de fantasía.
El carácter introspectivo de la chica queda bien retratado por Cosmatos, que ya se encarga de utilizar primeros planos que nos muestran a una joven enigmática, de mirada extraña, con una cicatriz en la cara y de una belleza perturbadora. Tal es su magnetismo personal que, caminando por el bosque, Mandy se cruza con una furgoneta en la que van los miembros de un culto a lo Charles Manson. El líder queda encandilado con su belleza, y necesita hacerla suya a toda costa, así que la manda secuestrar, para drogarla con el fin de que sea una nueva adepta, en una secuencia que desprende LSD por los cuatro costados. Y es en ese punto donde Mandy pone en evidencia al fanático líder religioso llamado Jeremiah (Linus Roache), que no tardará en vengarse de la joven, quemándola viva ante la mirada atónita de su pareja, un Nicolas Cage encadenado y torturado por los propios adeptos del culto y unas criaturas más aterradoras aún, una suerte de cenobitas mutados por alguna droga experimental, que recorren los bosques en sus vehículos cuasi futuristas como si de Mad Max se tratase.
La segunda parte del film se podría resumir con una sola palabra: venganza. Y es cuando Red decide acabar uno por uno con todos aquellos jipis religiosos, los perros del infierno ataviados con cuero, máscaras y pinchos y, por supuesto, con el líder Jeremiah. Para ello construye un arma mortal que será la ejecutora de su sangrienta venganza. Dicha arma fue inspirada por el logo de la legendaria banda de black metal Celtic Frost; la forma del arma es igual que la letra “F” que aparece en el logotipo de la banda, y justo en ese punto hay un buen guiño al black metal, donde vemos transformarse las letras de “Mandy” —el film está inundado de rótulos, a modo de capítulos— en un logo enrevesado propio del metal extremo, lleno de ramificaciones.
Es lo curioso de la cinta, como se ha dicho: está estructurada en forma de varios capítulos con sus rótulos, como si pretendiese contar diferentes historias o partes de una novela, e incluso el tipo de letra utilizado para esos rótulos es totalmente del estilo utilizado en aquellas novelas de finales de los setenta y principios de los ochenta generalmente de Terror o Fantasía. Por otra parte tenemos algunas escenas animadas que recuerdan mucho al cine ochentero tipo Heavy Metal (Heavy Metal, Gerald Potterton, 1981), en las que Mandy se aparece en los sueños de Red, descomponiéndose incluso como una calavera en una de las secuencias que recuerdan al anime Urotsukidoji (Chōjin Densetsu Urotsukidōji, 1989, Hideki Takayama).
El final resulta un auténtico baño de sangre y un descenso a los abismos infernales con un Nicolas Cage en moto recorriendo túneles secretos hasta llegar a la iglesia de Jeremiah, que simplemente parece estar ubicada en otro planeta o en algún otro mundo paralelo. A su vez la película no está exenta de humor, y sobre todo es Cage el que nos proporciona varios de esos momentos donde se presenta demasiado sobreactuado.
Panos Cosmatos demuestra también ser un gran fan de Don Dohler, como así podemos apreciar en una escena en la que Mandy y Red están viendo la televisión y en la pantalla aparecen escenas de Nacido en la noche (Nightbeast, 1982). Los que hayan visto las películas de Dohler enseguida se percatarán de la influencia que han ejercido sobre Cosmatos en algunas partes. Pero en realidad está llena de guiños y homenajes, a Galactus de los cómics Los 4 Fantásticos cuando mantienen una charla sobre planetas, a Viernes 13 cuando Mandy dice a una de las adeptas de la secta que vive en Crystal Lake, a Phantasma II o Masacre en Texas II en esa alocada batalla de motosierras, a Jóvenes ocultos (Lost Boys, 1987, Joel Schumacher) en el instante en que las siluetas de los Black Skulls se recortan en el horizonte al igual que la de los vampiros citados, o incluso al mismísimo Lucifer: su “sigil” aparece en un momento determinado de la película. Y, por supuesto, a Hellraiser: los que traen el infierno (Hellraiser, 1987, Clive Barker): una nueva raza cenobita ha nacido.
En definitiva, la película puede resultar lenta, el cine de Cosmatos lo es, pero también posee una imagen, unos planos y unos colores que son pura poesía por sí mismos, sin olvidar la banda sonora con unos maravillosos King Crimson. Como empecé diciendo antes, o la amas o la odias. ¿Y tú en qué bando estás? Yo lo tengo claro: en el primero.
Anécdotas
- En el festival de Sitges de 2018 el film consiguió premios en las categorías de mejor director y mejor actriz (A. Riseborough).
- El anuncio sobre el duende del queso fue concebido y dirigido por Chris ‘Casper’ Kelly.
- Originalmente a Nicholas Cage se le ofreció el papel del líder del culto, pero no le gustó, y prefirió al protagonista.
- Estrenada en Estados Unidos el 14 de septiembre de 2018 y el 12 de octubre en el Reino Unido. En España se estrenó el 31 de octubre.
Rubén Risco Fidalgo (Madrid. España)
CALIFICACIÓN: ****
- bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra