Godzilla y Kong han establecido una especie de entente cordiale por medio de que el primero habita en la superficie y el segundo en la Tierra Hueca. Cuando una amenaza terrible asedia el planeta, ambos habrán de aliarse para combatirla.
Dirección: Adam Wingard. Producción: Legendary Entertainment, Screen Queensland, Warner Bros. Productores: Alex Garcia, Eric McLeod, Mary Parent, Brian Rogers, Thomas Tull. Productores delegados: Jay Ashenfelter, Yoshimitsu Banno, Jennifer Conroy, Roy Lee, Gianluca Leurini, Dan Lin, Kenji Okuhira, Adam Wingard. Productores ejecutivos: Zakaria Alaoui, Kelsey Davidson, Karl Sigurdarson. Guion: Terry Rossio, Simon Barrett, Jeremy Slater, según una historia de T. Rossio, Adam Wingard, S. Barrett. Fotografía: Ben Seresin. Música: Antonio Di Iorio, Tom Holkenborg. Montaje: Josh Schaeffer. Diseño de producción: Tom Hammock. FX: Baked Studios, Double Negative (DNEG), Legacy Effects, Myriad Studios, Savage Visual Effects, Weta Workshop. Intérpretes: Rebecca Hall (Ilene Andrews), Brian Tyree Henry (Bernie Hayes), Dan Stevens (Trapper), Kaylee Hottle (Jia), Alex Ferns (Mikael), Fala Chen (reina de los iwi), Rachel House (Hampton), Ron Smyck (Harris), Chantelle Jamieson (Jayne), Greg Hatton (Lewis), Kevin Copeland, Tess Dobré, Tim Carroll, Anthony Brandon Wong, Sophia Emberson-Bain, Chika Ikogwe, Vincent B. Gorce, Yeye Zhou, Jamaliah Othman, Nick Lawler, Robert Clavero, Patrick Moroney… Nacionalidad y año: Estados Unidos 2024. Duración y datos técnicos: 115 min. – color – 1.90:1 (IMAX: algunas escenas) / 2.39:1 (copia para cines) – D-Cinema.
La continuidad de la franquicia Monarch estaba en el aire, y el productor Alex Garcia comentó en marzo de 2019 que esperaban hacer más aportaciones a la misma si había suficiente éxito. Godzilla vs. Kong se estrenó en marzo de 2021, y supuso un éxito arrollador, siendo todo un hit en plataformas de streaming durante la pandemia. La secuela, en ese caso, estaba ya asegurada, y para su dirección se volvió a contar con el mismo realizador, Adam Wingard, que era, al fin y al cabo, quien había coordinado esta empresa que se saldó con tanto beneficio económico.
En todo caso, Godzilla vs. Kong se caracterizaba por estar muy mal narrada visualmente, y eso es lo que, de nuevo, sucede con Godzilla y Kong: El nuevo imperio (Godzilla x Kong: The New Empire, 2024), pero con los defectos centuplicados. Sin embargo, no todos los inconvenientes de la película pueden ser achacados al realizador. En verdad, él (igual que en la previa) es uno más de los múltiples engranajes que conforman esta cadena comercial.
Ante todo, sorprende el guion debido a Terry Rossio, Simon Barrett y Jeremy Slater; el primero ya estuvo presente en la entrega anterior de la saga, y es creador de otra franquicia como la de «Piratas del Caribe». Ello ya da pistas de por dónde van los tiros por aquí. De tal modo, si la película previa ya mostraba bastantes fisuras en lo que respecta a su argumento, aquí estas se convierten en enormes lagunas narrativas, y sorprende cómo los productores han podido dar luz verde a un trabajo tan insuficiente a todos los niveles. El diseño de personajes se describe con una sola palabra, y no siempre con connotaciones positivas. La trama es prácticamente inexistente, y las posibilidades atractivas que por momentos se vislumbran se pierden debido a la insistencia en la digresión narrativa constante. En cuanto se apunta alguna idea interesante, de inmediato se salta a otra cosa, en un intento de aparentar un ritmo constante que en realidad oculta una anonadadora vacuidad.
El guion busca contentar a los aficionados veteranos efectuando alusiones a elementos provenientes de la franquicia nipona, para demostrar a estos que los guionistas han hecho los deberes. Eso es prácticamente todo lo que aportan a un trabajo muy poco esforzado, donde, como es norma en este tipo de productos, parecen preocuparse más por lo superficial y aparente por lo que es en verdad importa. Una trama, en definitiva, pueril y hueca, con la misma trampa que sucedía en la entrega anterior, esto es, dividir a los personajes en dos grupos e ir saltando de uno a otro, con lo cual cuando hay una escena que logra alcanzar un inicio de emoción, esta se diluye al instante para saltar a otra.
Por su parte, el director Adam Wingard actúa con el piloto automático, sin esforzarse lo más mínimo. El nulo desarrollo de personajes en el guion queda en evidencia al verlos trasladados a la pantalla; uno aseguraría que Wingard no les ha dado indicación alguna a los actores sobre cómo comportarse, dejándoles vía libre. Ello sería la explicación de que actores que aparecen en el film, y que conocemos con anterioridad como competentes, aquí semejen de una mediocridad alarmante. Y, seamos francos, la mayoría de los personajes resultan insoportables, aunque aquí la nómina se amplía exponencialmente, y no solo son así los humanos, sino inclusive las figuras informáticas, como es el caso de mini-Kong.
Y este último comentario nos conduce a lo que, en cierto modo, da cuerpo entero a todo este (sub)producto millonario: los efectos especiales. Teniendo en cuenta el presupuesto del film (135 millones de dólares) es obvio que han de tener una solución satisfactoria. Sin embargo, diríase que ahí las supuestas virtudes se acaban. Su buena factura técnica, en todo caso, no impide que muestren una absoluta falta de personalidad y de magia. Nos da la impresión de estar ante un juego de ordenador, con diseños sin alma que no paran de darse mamporros entre un montón de ruido y furia. Y ese aspecto de diseño por IA se traslada al resto del film, acaso en un etalonaje que busca que haya cierta unidad entre todas las imágenes: al final, los propios actores semejan también figuras artificiales. Godzilla y Kong: El nuevo imperio es una operación comercial encaminada a llenar las salas con un público que solo busca un espectáculo tan aparente en la superficie como vacío en el fondo, y que además comete uno de los pecados más horribles que puede tener una película de estas características: aburre.
Anecdotario
- Título de rodaje: Son of Kong.
- Título en Argentina, Chile, Colombia y Ecuador: Godzilla x Kong: El Nuevo Imperio. Título en México y Perú: Godzilla y Kong: El Nuevo Imperio.
- El presupuesto estimado es de 135 millones de dólares.
- La filmación se realizó en Queensland, Australia (incluyendo los Village Roadshow Studios, en Oxenford), Río de Janeiro, Brasil, El Cairo, Egipto, México y Hong Kong.
- Adam Wingard reveló que Arma letal (Lethal Weapon, Richard Donner, 1987) fue una inspiración para la película, así como los anuncios de juguetes de los ochenta del pasado siglo.
- El nuevo diseño de Godzilla tiene placas de color púrpura/rosa similares a las de su diseño MireGoji de Gojira ni-sen mireniamu [dvd: Godzilla 2000: Millennium, Takao Okawara, 1999] y Gojira tai Megagirasu: Jî shômetsu sakusen (Masaaki Tezuka, 2000).
- Películas previas de la franquicia:
Godzilla (Godzilla, Gareth Edwards, 2014).
Kong: La Isla Calavera (Kong: Skull Island, Jordan Vogt-Roberts, 2017).
Godzilla: Rey de los monstruos (Godzilla: King of the Monsters, Michael Dougherty, 2019).
Godzilla vs. Kong (Godzilla vs. Kong, Adam Wingard, 2021).
- Estrenada en España el 27 de marzo de 2024, con algo de antelación (así como en otros muchos países) al propio Estados Unidos, que lo fue el 29 de marzo de 2024.
Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)
CALIFICACIÓN: •
- bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra