Cuando es explorado un barco abandonado en el muelle neoyorquino, este muestra en su interior, entre un supuesto cargamento de café colombiano, una serie de extraños huevos del tamaño de melones, que al estallar contaminan a los que están cerca y luego les hace asimismo explotar. Una coronel del ejército y un teniente de la policía se ponen a investigar, y descubren que todo arrancó con una expedición a Marte, de donde uno de los astronautas llegó diciendo que allí vio algo…
Dirección: Luigi Cozzi [acreditado como Lewis Coates]. Producción: Alex Cinematografica, Barthonia Film, Lisa-Film. Productor: Claudio Mancini. Productor ejecutivo: Karl Spiehs. Productor asociado: Ugo Valenti. Guion: Luigi Cozzi, Erich Tomek, según una historia de L. Cozzi. Fotografía: Giuseppe Pinori. Música: I Goblin (Agostino Marangolo, Antonio Marangolo, Fabio Pignatelli). Montaje: Nino Baragli. Diseño de producción: Massimo Antonello Geleng. FX: Claudio Mazzoli (diseño del cíclope), Georgio Ferrari (constructor del cíclope), Giovanni Corridori, Valerio Mazzoli (efectos especiales). Intérpretes: Ian McCulloch (comandante Ian Hubbard), Louise Marleau (coronel Stella Holmes), Marino Masé (teniente Tony Aris, de la policía de Nueva York), Siegfried Rauch (Hamilton), Gisela Hahn (Perla de la Cruz), Carlo De Mejo (agente Young), Carlo Monni (Dr. Turner), Horst Weinert (Dr. Hilton), Ettore Martini (general), Nat Bush (guarda del almacén), Angelo Ragusa (hombre en el almacén), Martin Sorrentino (trabajador negro de la fábrica), Brigitte Wagner (doctora)… Nacionalidad y año: Italia, Alemania 1980. Duración y datos técnicos: 95 min. / 84 min. – color – 1.85:1 – 35 mm.
Viendo el título español de Contaminación: Alien invade la Tierra (Contamination – Alien arriva sulla Terra / Astaron – Brut des Schreckens, 1980) —y los de otros países, en similar tónica, ahí mismo tenemos el italiano— podría parecer que el presente filme busca inspiración más o menos obvia (o, si acaso, explotar la alusión) al clásico y gran éxito comercial de Alien, el octavo pasajero (Alien, Ridley Scott, 1979). Y, cierto es, al inicio el proyecto iba en esa onda, pero por fehacientes motivos presupuestarios, en lugar de transcurrir en el espacio —como sí había hecho la anterior película de Luigi Cozzi, Starcrash – Choque de galaxias (Scontri stellari oltre la terza dimensione, 1978)—, se decidió trasladar la premisa a la Tierra, y escribió un guion titulado Alien arriva sulla Terra.
De la idea de «imitar» Alien se conserva el concepto de los huevos alienígenas que contaminan, de alguna manera, a los humanos. Además, según el productor Claudio Mancini, este quería utilizar el nombre de Contamination, que fue el título provisional de una película abortada que había estado desarrollando inspirada en la película El síndrome de China (The China Syndrome, James Bridges, 1979). El título, por tanto, se cambió, aún en contra de los deseos de Cozzi, y Mancini también insistió en que el director y guionista desarrollara más elementos al estilo de James Bond en oposición a su tema de ciencia ficción. De esta manera, la película resultante dispone de una estructura de paulatina investigación con tono de thriller, que en verdad se hace interesante, pues se va desarrollando poco a poco una intriga que adquiere visos cada vez más cautivantes.
Y, más que similitudes con Alien, al final parece una especie de mezcla entre La invasión de los ultracuerpos (Invasion of the Body Snatchers, Philip Kaufman, 1978) y Quatermass 2 [tv: El experinento del doctor Quatermass 2; dvd: Quatermass II, Val Guest, 1957], lo cual ejemplifica la pasión que Cozzi experimenta hacia la ciencia ficción clásica. El tono global del film, además, se asemeja a uno de los típicos bolsilibros españoles de una década antes, que podría haber sido escrito por Curtis Garland (o sea, Juan Gallardo Muñoz), por ejemplo. Cabe destacar la escena del baño, en la línea de los ladrones de cuerpos, muy conseguida, o inclusive la historia de amor, que, pese a evidente, resulta atractiva por conjuntar a una mujer inteligente con un hombre primario.
Sin embargo, la película dispone de dos inconvenientes graves que repercuten en la calidad global del resultado fílmico. Por un lado, tenemos la gran mediocridad de todo el reparto. Incluso el escocés Ian McCulloch, que ha aparecido en determinadas producciones británicas de calidad, aquí no pasa del estereotipo de su papel, si bien el peor de todos es Marino Masé como el policía Tony Aris, que está absolutamente lamentable. Las interpretaciones de todo el cast sumergen a la película en un tono de superficialidad lamentable.
El otro gran detrimento del film —y aquí sé que me voy a ganar el desprecio y el insulto de muchos aficionados— es el acompañamiento musical que aporta el grupo I Goblin, que es de un machacón y simplismo que convierten a las imágenes que algo ramplón. Hay planos que exigen una partitura, y sin embargo se desarrollan en un frío silencio, mientras que cuando entra la banda a tocar sus composiciones, todo se tiñe de un tono de serie Z tosco y anodino, restando a las imágenes esa impronta de serie B pulpera que Cozzi desarrolla.
Queda, por supuesto, ese tono pulp, ese aire de aventura en clave de thriller que va incursionando en la ciencia ficción, con ese monstruo ciclópeo procedente de Marte que se oculta en una fábrica de café colombiano, lo cual origina un film absolutamente adorable, pese a las muchas imperfecciones que lo adornan. Pero el sentido lúdico y desinhibido que le aplica Coates hacen de Contaminación: Alien invade la Tierra un producto superior a la media de esas imitaciones italianas que buscan escudarse en éxitos ajenos para procurarse el propio.
Anecdotario
- Título en Argentina: Alien: Contaminación. Títulos en México: Alien llega a la Tierra / Contaminación – El mundo en peligro.
- Títulos anglosajones: Contamination / Contamination: Alien on Earth / Alien Contamination / Toxic Spawn / Larvae.
- El rodaje, con un presupuesto estimado de 225.000 dólares, transcurrió entre el 18 de enero de 1980 y el 4 de marzo de 1980, en Nueva York, Florida y Nueva Jersey, en Estados Unidos; en Anzio, Italia; y en el Hotel El Prado y el Aeropuerto Internacional de Cortissoz, en Barranquilla, Atlántico, Colombia, entre otras localizaciones. De ese rodaje, tres semanas correspondieron a Italia, y dos para Estados Unidos y Colombia.
- En Italia tuvo poco éxito de taquilla, pero en cambio fue bien recibida en el extranjero.
- Existen diversos montajes notablemente censurados de los planos gore. Algunos, incluso eliminando la trama romántica.
- Una de las 72 películas de la lista Video Nasty del Director of Public Prosecutions y parte de la Ley de Grabaciones de Vídeo de 1984 en el Reino Unido.
- En la versión al italiano, los dobladores que intervinieron fueron: Cesare Barbetti (Ian McCullouch), Pino Colizzi (Marino Masè), Maria Pia Di Meo (Louise Marleau) y Gianni Marzocchi (Siegfried Rauch); en la versión inglesa participaron Larry Dolgin (Marino Masé) y Susan Spafford.
- Según explicó Luigi Cozzi, la película fue financiada en parte por narcotraficantes colombianos. Cuando la película ganó dinero, se sintieron muy satisfechos con su inversión.
- El cíclope alienígena iba a ser mucho más articulado, pero no se mostró por problemas mecánicos. Además, Cozzi quería haberlo ofrecido por medio de efectos de stop-motion, pero el productor impuso un animatronic.
- Los huevos alienígenas que se ven a lo lejos se hicieron con globos pintados de verde, mientras que en las escenas en las que aparecen enmarcados se hicieron con silicona con una luz intermitente en el interior para dar el efecto de pulsaciones.
- En las escenas en las que los cuerpos humanos se infectan y explotan, recurrieron a atar por la espalda de los actores una barriga falsa llena de vísceras conseguidas en una carnicería, y se les hizo explotar gracias a un tubo de aire comprimido.
- Los nombres de los astronautas Hubbard y Hamilton rinden homenaje a los escritores de ciencia ficción L. Ron Hubbard y Edmond Hamilton.
- Luigi Cozzi quería a Caroline Munro para encarnar a la coronel Stella Holmes. Munro ya había trabajado con él en Starcrash – Choque de galaxias (Scontri stellari oltre la terza dimensione, 1978), su película inmediatamente anterior a la presente. Sin embargo, el productor impuso a Louise Marleau, quien también seleccionó a Ian McCulloch, que era el protagonista de Nueva York bajo el terror de los zombies (Zombi 2, Lucio Fulci, 1979), que se había producido en la oficina al lado de esta, y sobre cuyo éxito Mancini tomó buena nota.
- Estrenada en Italia el 2 de agosto de 1980, en Alemania el 5 de septiembre de 1980 (otras fuentes indican que el 9 de mayo) y en España en octubre de 1980.
Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)
CALIFICACIÓN: **½
- bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra