Dan y Laura están de luna de miel en una finca de él cuando Spanky, un gorila que él tiene encerrado en una jaula, escapa e intenta violar a Laura, por lo cual el hombre ha de matarle. Conmocionada, y no precisamente de modo negativo, ella se somete a una sesión de hipnosis, y descubre que en una vida anterior fue una gorila.

Dirección: Adrian Weiss. Producción: Adrian Weiss Productions para Allied Artists Pictures. Productor: Adrian Weiss. Guion: Edward D. Wood Jr., según una historia de Adrian Weiss. Fotografía: Roland Price. Música: Les Baxter. Montaje: George M. Merrick. Diseño de producción: Edward Shiells. FX: George Endler (efectos especiales). Intérpretes: Charlotte Austin (Laura Carson Fuller), Lance Fuller (Dan Fuller), Johnny Roth (Taro, el sirviente), William Justine (Dr. Carl Reiner), Jeanne Gerson (Marka, la cocinera), Gil Frye (capitán Cameron), Trustin Howard [acreditado como Slick Slavin] (soldado), Bhogwan Singh (nativo), Eve Brent [acreditada como Jean Ann Lewis] (camarera), Ray Corrigan (Spanky), Steve Calvert (gorila), Bobby Small (gorila)… Nacionalidad y año: Estados Unidos 1958. Duración y datos técnicos: 78 min. B/N 1.85:1.

 

Ed Wood, el considerado peor director de la historia, es el guionista de este film, que por lo que más destaca es porque, en comparación con los que él realizó, parece una producción mucho más apañada. Y eso que se hizo con un presupuesto ínfimo, y con imágenes de archivo o tomadas de otras cintas, pero fue distribuida por una compañía de cierto peso, Allied Artists, y cuenta con música nada menos que de Les Baxter, que otorga cierto brío a las imágenes.

El director, en esta ocasión, es Adrian Weiss, quien, desde luego, no puede ufanarse de ser superior a Wood. Hijo del productor Louis Weiss, que hizo unas pocas películas de serie B, Adrian trabajó en varias de las cintas de este en tareas de producción, como los míticos seriales La mano que aprieta o Los misterios de Nueva York (The Amazing Exploits of the Clutching Hand, 1936) y La moneda rota (The Black Coin, 1936), ambos dirigidos por Albert Herman, así como El rey de la jungla (Jungle Menace, 1937), de Harry L. Fraser y George Melford.

La presente película, de hecho, se sustenta en imágenes «robadas» de dos producciones de temática selvática, El tigre de Kumaon (Man-Eater of Kumaon, Byron Haskin, 1948), protagonizada por Sabú, y Bride of the Gorilla [dvd: La novia del gorila, Curt Siodmak, 1951]. Weiss perpetró una trama donde, más o menos, integrar las imágenes escogidas, y pasó a Wood la tarea de componer un guion con todo ello. Guion que, desde luego, es inconexo al máximo, a tal punto que parecen dos cortometrajes intercalados: por un lado tendríamos la trama gorilesca, con el arranque y el final, y por otro la historia de los tigres. ¿Tigres en África, preguntará el lector? Expliquémonos.

El film comienza en Estados Unidos, con la pareja protagonista, Laura y Dan, yéndose de luna de miel. En lugar de trasladarla a Miami o a Niágara, él la conduce a una mansión misteriosa aislada en el bosque, y en cuyo sótano mantiene en una jaula a un gorila. «Es hermoso», dice ella, y se le queda mirando de un modo que parece que prefiere pasar la luna de miel con el animal. Al fin se acuestan marido y mujer, cada uno en una cama, y el gorila escapa, atacando a la fémina. Ella, en verdad, se resiste poco, incluso cuando el mono le arranca el camisón, y al final el marido abate al primate.

Conmocionada con lo que ha sentido, consulta con un médico amigo del marido, el doctor Carl Reiner (sí, como el director de cine), quien la hipnotiza. En la época en que se rodó el film estaba muy de moda el tema de la reencarnación. En 1952, un hombre de negocios e hipnotizador aficionado, Morey Bernstein, durante una fiesta sometió a trance a un ama de casa, Virginia Tighe, y en una regresión ella dijo ser la reencarnación de una tal Bridey Murphy, una irlandesa del siglo XIX de la que aportó montones de datos que después, por medio de una investigación, fueron comprobados y confirmados. Del caso luego se publicó un libro, La búsqueda de Bridey Murphy (The Search for Bridey Murphy, 1956), escrito por el propio Bernstein, y se rodó una película, The Search for Bridey Murphy (1956), de Noel Langley, protagonizada por Teresa Wright y Louis Hayward. Y hubo una fiebre en todo el país con el asunto, componiéndose incluso canciones, y en cine, por ejemplo, se ofrecieron filmes explotando la idea de la reencarnación, como I’ve Lived Before (1956), de Richard Bartlett, The She-Creature [tv/dvd: La criatura, 1956], de Edward L. Cahn, o The Undead [tv: La no muerta, 1957], de Roger Corman.

En fin, que Laura es hipnotizada y en la regresión informa que, en una vida anterior, fue gorila. El matrimonio se traslada a África, y mientras están en el campamento se comunica que dos tigres han escapado durante un naufragio y ahora están rondando por el lugar y matando. Ahí se aprovecha para insertar imágenes de la película de Sabú, mientras que en la trama se ofrece a personas paseando por la selva al tiempo que por el lugar merodean dos tigres devoradores de hombres (y mujeres), y con Dan, que es definido como un cazador portentoso, vagando por el lugar para cazar a los dos animales; y así, vaga, y vaga, y vaga… Y falla, y falla, y falla… Cuando al fin se ha rellenado suficiente metraje, al fin caen abatidos ambos tigres y se regresa a la trama del gorila…

La presencia de Laura en el lugar, que ha sido herida y que parece que ha perdido todo raciocinio, de alguna manera, ha provocado que los gorilas de la zona se sientan atraídos… Uno de ellos llega al campamento, la vigila, y al fin la secuestra, llevándosela a una cueva, donde diversos monos se acercan a observarla. Es una lástima que Dan llegue a tiempo y no podamos comprobar qué planes lúbricos tenían los animales para con la mujer… En todo caso, el film acaba de pronto, en un coitus interruptus, y nunca mejor dicho.

El guion, desde luego, es tan caótico y deslavazado como aparenta, y la realización de Weiss, en esta su única película en el campo, salvo error, está en consonancia. De apenas hora y cuarto de metraje, se hace interminable y aburrida, con los personajes comportándose de forma absurda con el fin de conducirse del modo que las imágenes de archivo encajen, más o menos. En ese sentido, otro film de montaje muy posterior, Cliente muerto no paga (Dead Men Don’t Wear Plaid, 1982), dirigido precisamente por Carl Reiner, estaba mejor articulado. Todo lo referente a la atracción que Laura siente por los gorilas, y la que experimentan los gorilas por Laura, tiene mucha gracia, pero es algo tan ínfimo dentro de todo el cotarro que no sirve ni como locura psicotrónica, y el resultado es un engendro sin parangón.

 

Anecdotario

  • Título de rodaje: Queen of the Gorillas.
  • Última película en la cual Ray ‘Crash’ Corrigan interpretó a un gorila, especialidad suya. Ese mismo año apareció en It! The Terror from Beyond Space [dvd/tv: El terror del más allá], de Edward L. Cahn, donde hacía de extraterrestre, y luego se retiró.
  • Algo más de la mitad del metraje está relleno con imágenes de archivo de África. Además, toma planos de las películas El tigre de Kumaon (Man-Eater of Kumaon, 1948), de Byron Haskin, y Bride of the Gorilla [dvd: La novia del gorila, 1951], de Curt Siodmak.
  • El amigo de Steve Calvert, Bobby Small, que trabajaba principalmente como payaso de circo, se puso el traje alternativo de gorila en las escenas que requerían dos simios en la misma toma.
  • Eve Brent, que aquí trabaja bajo el nombre de Jean Ann Lewis, sería después Jane en un par de película de Tarzán.
  • Esta película se estrenó en cines norteamericanos en programa doble con The Beast of Budapest (1958), de Harmon Jones.
  • Estrenada en Estados Unidos el 23 de febrero de 1958. En España, salvo error, nunca se ha proyectado comercialmente.

 

Carlos Díaz Maroto (Madrid. España)

 

CALIFICACIÓN: *

  • bodrio * mediocre ** interesante *** buena **** muy buena ***** obra maestra